A principios de noviembre del 2015, y a raíz del desmantelamiento de una de las tantas redes de tráfico de personas que operan en el territorio nacional, se visualizó un negocio multimillonario de tráfico con migrantes que desde años se viene dando, con la complicidad o permisividad de policías, funcionarios de migración y políticos que conocen de este lucrativo negocio y lo callan.
Nicaragua también fue por años cómplice del mismo negocio que favorecía a coyotes (o traficantes de personas) de Ecuador, Colombia, Panamá y Costa Rica entre otros. Una llamada de atención al respecto por parte del Gobierno cubano a Daniel Ortega para parar esta “migración económica” provocada no tanto por la huida de un régimen socialista sino por las facilidades para cumplir el “sueño americano” que brinda Estados Unidos de forma injusta y preferencial solo a los ciudadanos de Cuba, ha provocado un caos nunca antes visto.
El gobierno de Nicaragua, acorde con su legislación de no permitir el paso por su territorio de personas sin documentos legales reconocidos en su país, cerró definitivamente sus fronteras a la migración cubana, culpando a Costa Rica de provocar la crisis humanitaria al seguir recibiendo ilegalmente a los cubanos en su territorio, presionar en sus fronteras y vender a la opinión internacional el discurso de “defensora de los derechos de migrantes”, a sabiendas que los funcionarios ticos están violando su misma legislación migratoria al otorgar a diestra y siniestra “visas extraordinarias” que se sacaron de la manga para congraciarse con los enemigos del régimen castrista más que por humanidad, pues no hace lo mismo con migrantes africanos, sirios, jamaiquinos, haitianos, dominicanos ni otros.
Lo simpático de esta crisis humanitaria sin precedentes, provocada sin duda por la coyuntura en que Estados Unidos y Cuba mejoran sus relaciones, por una red de tráfico desaparecida y por decisiones desacertadas en Costa Rica y Nicaragua, es que el cantón de La Cruz está entre los más afectados (o favorecidos) de esta crisis de migrantes. La campaña política interna para elegir Alcalde, regidores y síndicos se ha calentado como nunca porque la Municipalidad encontró en la crisis un trampolín político electorero; la población del distrito central creció de un día a otro casi en un 25%; los hoteles no reportan habitaciones vacías; el guaro no alcanza en los bares y restaurantes que inteligentemente han ampliado sus horarios de atención; los supermercados permanecen abarrotados, los taxistas no paran, el tránsito vehicular se volvió inusual; las empresas telefónicas están haciendo su gran fiesta al ofrecerle a los cubanos sus mejores ofertas; las iglesias cristianas están en plena campaña proselitista para ver cuál agrada más a Dios ayudando a los migrantes cubanos (ese mismo Dios que a veces les cuesta descubrir en los migrantes nicaragüenses)… Sólo espero que dentro de 9 meses no aumente también precipitadamente el nacimiento de niños cubano- ticos, que ya de por sí La Cruz tiene este triste record nacional con las madres adolescentes solteras.
Algo que mucha prensa nacional e internacional no cuenta a la opinión pública es que esta oleada de migrantes en general no son “pobrecitos” como indican, sino pudientes que pagaron cada uno 15 mil dólares al coyote que les ofreció el viaje 5 estrellas al sueño americano. A diferencia de los migrantes nicaragüenses de bajo nivel económico y educativo, ellos son profesionales en los que el gobierno de Cuba puso becas para que se graduaran en prestigiosas carreras para servir a su pueblo, pero que traicionaron su compromiso y decidieron huir y ahora piensan ejercerlas de forma capitalista para beneficio de los Estados Unidos, que recibe agradecido esta fuga de cerebros cubanos que aprovechará a granel y sin invertir en ellos ni un dólar. Ojalá muchos de estos cubanos, excelentes profesionales, decidan quedarse en Costa Rica y enriquecer más nuestra patria: a eso deberían apostar todas sus fuerzas las autoridades nacionales y no a continuar aumentando con sus declaraciones la guerra mediática de insultos a Nicaragua, que de nada nos aprovecha.
Guanacaste no miraba un arribo tan masivo de cubanos desde finales del siglo XIX, cuando el general Antonio Maceo y centenares de cubanos se asentaron en La Mansión de Nicoya y dieron creación a la Granja Agrícola Modelo más famosa de todo Centroamérica. Algunos se regresarán a Cuba para luchar por su independencia, pero la mayoría se quedarán en Guanacaste para compartir nuestro destino patrio.
GRACIAS, Cuba, porque en momentos claves de nuestra historia patria te has hecho presente para seguir dándonos ejemplos de lucha, trabajo y perseverancia, para permitirnos una autocrítica al trato que damos a los migrantes y darnos la oportunidad de descubrir la manipulación de la prensa que en vez de dedicarse a informar a la opinión pública de forma veraz y objetiva, acrecienta la xenofobia contra Nicaragua y su gente, contra Cuba y su socialismo que invierte en becas y educación para su pueblo, a pesar de la injusta e inmoral “Ley de ajuste cubano” de Estados Unidos que fomenta la fuga de cerebros.
Fuente: El Independiente
No hay comentarios:
Publicar un comentario