Hablemos de Soberanía Alimentaria

Por Eduardo José Vallecillo Barberena

El presente documento es el primero de una serie que tienen la intención de contribuir a que todas y todos los que deseamos luchar contra la pobreza el hambre y la desnutrición, promovamos la Soberanía Alimentaria, fortaleciendo el debate, divulgando de esta manera la propuesta integral de la Soberanía Alimentaria. En esta primera ocasión es un esbozo general, con la intención de ir presentando posteriormente análisis más particulares de cómo diversos procesos son también elementos que integran la Soberanía Alimentaria.

La Soberanía Alimentaria debemos llevarla a todos los sectores sea posible. Hoy tenemos la posibilidad de multiplicar la Soberanía Alimentaria como un modelo para poder salir de la pobreza, el hambre y la desnutrición. La única manera de que esto se logre es que todos y todas estemos sensibilizados y conscientes de que las causas de la pobreza y el hambre son diversas con el elemento común ligado a las decisiones políticas como efecto principal que se deriva de la injusticia, la inequidad en las relaciones, entre naciones, clases sociales, razas y entre hombres y mujeres; de tal manera que la Soberanía Alimentaria se convierte en una respuesta integral que nos plantea el roll que nos corresponde en todo el proceso.

Estos procesos de sensibilización por la Soberanía Alimentaria, hace unos años eran impensables, la mayor parte de los esfuerzos desarrollados planteaban las denuncias sobre los abusos que el sistema neoliberal venía ejerciendo en los países pobres, estableciendo poco a poco un sistema alimentario que ha destruido la economía familiar de los indígenas, pescadores, pastores y campesinos alrededor del mundo, quienes históricamente han sido los principales responsables de la alimentación en sus naciones.

Era mas fácil referirse a técnicas nutricionales, procesos metodológicos de cómo fortalecer nutricionalmente a una población hambrienta y desnutrida, llevándoles paquetes alimentarios producidos en los países del norte, como normalmente ha sido la dinámica de la ayuda alimentaria que el Programa Mundial de Alimentos (WFP) organismo de las Naciones Unidas responsable de promover la entrega de alimentos a los que necesitan en todo el mundo, de ésta manera estableciendo solamente programas asistencialistas, sin poder intentar resolver la causa principal del hambre, esto era conocido como acciones por la Seguridad Alimentaria Nutricional.

Comprender la fortaleza de la Soberanía Alimentaria nos lleva a reafirmar la convicción de que la causa del hambre es fundamentalmente política y quien lamentablemente tiene el control es el capitalismo salvaje teniendo como consecuencia todo el panorama desolador que actualmente vive el planeta, con más de 1,100 millones de seres humanos que padecen hambre y desnutrición, con los más altos niveles de pobreza, con el clima que esta cambiando trayendo consecuencias catastróficas sobre todo en los países más vulnerables que irónicamente son los más pobres.

En los últimos 20 años todas las acciones que el neoliberalismo emprendió en nombre de la globalización para el desarrollo de los pueblos, fue todo lo contrario, porque han sido de atropello a la dignidad de los pueblos en vías de desarrollo llevándoles más pobreza, provocando con ello mayor cantidad de personas hambrientas y desnutridas. Todas y cada una de estas acciones han llevado a mantener el control de la decisión política de lucha o no contra las causas que realmente propagan la pobreza el hambre y la desnutrición en el mundo.

Todas las estructuras financieras del neoliberalismo han establecido presiones fuertísimas sobre los gobiernos con los cuales han establecido mecanismos de “cooperación”. Desde el año 1990 se empezaron a implementar los ajustes estructurales con la supervisión del Fondo Monetario Internacional desde esa época cada uno de los países debe de realizar un examen ante el FMI para poder obtener el visto bueno si su economía esta en condiciones correctas según sus parámetros.

Estos ajustes estructurales promovieron la privatización de los servicios básicos así como la intensión de privatizar los recursos naturales como el agua, la tierra, las semillas con su propuesta de utilizar semillas modificadas genéticamente creando una gran dependencia de un paquete tecnológica controlado por las transnacionales, sin dejar por fuera en hacer mención del daño grave que se ejercerá a la Diversidad Biológica con esta propuesta. De igual manera han eliminado todas las formas de asistencia económica y técnica de parte de los gobiernos a los pequeños y medianos productores, eliminando toda institución financiera publica que ejerciera esa función.

Han fortalecido sus estructuras del control del mercado llevando a la agricultura a esos niveles despiadados de la especulación sin importar cuanto seres humanos dejen de comer, porque es más importante obtener jugosas ganancias con la especulación en las bolsa de valores.

Han obligado a los países pobres a firmar Tratados de Libre Comercio, garantizando de esa manera el total y libre dominio del mercado de éstos, permitiendo a las transnacionales de alimentación dominar el mercado sobre los productos locales, influyendo de tal forma que han empezado a sustituir la cultura alimenticia local por la que ellos proponen, no solo promoviendo con gran cantidad de recursos y dominio de los medios de comunicación sino que sustituyendo costumbres ya establecidas con productos generados por las transnacionales sin dejar por fuera el gran esfuerzo que hacen por desplegar recetas alimenticias que exigen o promueven estrictamente el uso de sus productos.

Los recursos humanos en los últimos 30 años han sido orientados al Desarrollo que según el capitalismo, es fortalecer los mercados de exportación (modelo de agricultura exportadora, monocultivo etc.) designando a los países pobres que deben sembrar, cómo deben hacerlo, con el objetivo de satisfacer las necesidades de los países del norte como un gran mercado, con excelentes oportunidades para llevar recursos a los países pobres en donde en ultima instancia quien se aprovecha de esos recursos es la burguesía local, que con actitud vende patria promueve cada una de todas las propuestas que el neoliberalismo ha venido proponiendo.

Cada uno de estos elementos han generado mayor desigualdad entre pobres y ricos, han traído como consecuencia la destrucción de la economía familiar campesina en donde estaba conformada la base de la alimentación de los pueblos, han promovido como salida la migración a otros países, la migración de la ciudad al campo aumentando grandes círculos de pobreza y miseria en las principales ciudades, muchos gobiernos han creído generar riqueza llevando grandes zonas francas en donde cientos de miles de sus conciudadanos laboran por salarios de miseria y explotación y maltrato laboral.

Obviamente todos estos elementos son apenas algunos que indican la punta del iceberg del problema que sin lugar a duda genera las políticas públicas frente a la lucha contra la pobreza, el hambre y la desnutrición, que sinceramente nunca van ha ser eficientes por la presión que ejerce el neoliberalismo sobre los gobiernos de los países en vías de desarrollo.

Sin embargo se han generado muchas herramientas, indicaciones, directrices voluntarias, etc. Por parte de los especialistas en Seguridad Alimentaria Nutricional, han sido complices de los países poderosos queriendo solucionar el hambre de los pueblos solamente llevándoles alimentos, generando mayor dependencia y perdida de autoestima de las poblaciones que según ellos benefician, todas estas decisiones no atacan ni ejercen ninguna influencia en las decisión política que permita elaborar políticas publicas contra el hambre, hoy ésta nos ha horrorizado con mas de mil millones de seres humanos que sufren y mueren por falta de alimentos y la pobreza en el mundo.

Es por ello que la Soberanía Alimentaria aparece como alternativa para combatir el hambre y la desnutrición, lucha contra la pobreza y toda expresión de desigualdad, lo que le otorga ser la opción más viable en estos momentos, con mayor razón cuando el capitalismo salvaje esta en crisis y el planeta vive momentos de angustia como resultado del mal trato del que ha sido victima.

Han transcurrido 14 años desde que apareció el concepto firme de la Soberanía Alimentaria sin lugar a duda tiene una gran base en la sabiduría de los pueblos. Un gran aporte del movimiento campesino, pastores y pescadores artesanales y los pueblos indígenas a la humanidad, hoy es el tiempo de juntar muchos procesos alrededor de la Soberanía Alimentaria, es el tiempo de detener el avance del hambre. Debemos por lo tanto construir la Soberanía Alimentaria desde todos los espacios posibles

Hoy se habla de la nueva gobernanza en el Consejo de Seguridad Alimentaria, sin lugar a duda es un avance en la lucha global, que debe llevarse ha a expresiones regionales, nacionales y locales, pero mientras la decisión política no nos permita avanzar en el marco de la construcción de procesos de Soberanía Alimentaria, seguiremos contemplando la hipocresía de los países poderosos tratando de solucionar los problemas de los países pobres, resolviendo primero los de ellos.

Esto quiere decir que mientras se continúen desarrollando las políticas globales, y se siga pensando que una nueva revolución verde con nuevas tecnologías con el uso de Organismos Genéticamente Modificados en la agricultura, se seguirá cometiendo el mismo error, favoreciendo siempre las economías de los países ricos y poderosos.

Hoy que se achaca a la producción de alimentos los trastornos de nuestro planeta, mientras pretenden alimentar automóviles con combustibles elaborados con alimentos como es el maíz.

El capitalismo por su naturaleza impedirá toda acción a los pueblos que impliquen tener su propia autodeterminación, tomar sus propias decisiones de cómo alimentarse y que sistema alimentario implementar, lo que solamente con la Soberanía Alimentaria lo podremos lograr.

El esquema muestra cómo frente al Capitalismo Salvaje y todas sus expresiones, la Soberanía Alimentaria funciona como si fuese un paraguas bajo el cual se deben juntar muchos procesos que le fortalecen. Esto ha permitido que muchos sectores hoy en la actualidad cierren filas por la Soberanía Alimentaria a la par del movimiento campesino, pescadores artesanales, pueblos pastoriles e indígenas que desde La Vía Campesina fueron los que plantearon por primera vez a la Soberanía Alimentaria como la respuesta a la extrema pobreza, hambre y desnutrición que sufren los pueblos en vías de desarrollo.

Cada uno de nosotros es responsable por levantar la bandera de la Soberanía Alimentaria desde cualquiera que sea nuestro espacio o trinchera, hoy mas que nunca es urgente avanzar en construir procesos locales, nacionales y regionales en políticas publicas concretas y serias contra el hambre y la desnutrición, es urgente que cada persona conozca, entienda y opte por un mejor futuro sin pobreza, sin hambre ni desnutrición porque ¡Ahora es tiempo de Soberanía Alimentaria!