El pasado 22 de agosto la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) efectuó una visita in situ a la comunidad garífuna de Triunfo de la Cruz, en el marco del caso que ventila Triunfo de la Cruz versus el Estado de Honduras.
El caso en cuestión es la acumulación de más de treinta denuncias por la usurpación perpetrada por la élite de poder hondureña y la municipalidad de Tela; además de violaciones al Derecho a la Consulta Previa, Libre e Informada, consignada en el Convenio 169 de la OIT y la Declaración de Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas.
El caso en cuestión es la acumulación de más de treinta denuncias por la usurpación perpetrada por la élite de poder hondureña y la municipalidad de Tela; además de violaciones al Derecho a la Consulta Previa, Libre e Informada, consignada en el Convenio 169 de la OIT y la Declaración de Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas.
Previa a la visita a la comunidad Garifuna, el día 21 se efectuó una reunión en la ciudad de Tela, con la participación de la Honorable Corte IDH y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), además del alcalde de Tela y algunos de los representantes de supuestas compañías turísticas que han usurpados tierras comunitarias para desarrollar proyectos turísticos.
La reunión fue efectuada en la antigua sede de la Tela Railroad Company, en donde hizo presencia, además, el grupo de trabajadores de la municipalidad de Tela, a los que les cancelaron sus prestaciones con 22 manzanas de tierra pertenecientes a la comunidad de Triunfo, generando un conflicto que ha sido utilizado para fomentar el racismo ya existente en la zona.
El alcalde de Tela, Mario Fuentes, en su intervención durante la reunión fue enfático en indicar que el racismo no existía en Tela, al mismo tiempo que acarreó en masa a los exempleados de la municipalidad de Tela, los que fueron engañados al recibir las 22 manzanas de tierra de Triunfo como pago por sus prestaciones laborales.
La visita a la comunidad de Triunfo incluyó Punta Izopo, lugar donde el fallecido palmero de la muerte, Miguel Facussé, instauró el Parque Nacional Punta Izopo, sin haber efectuado una consulta comunitaria, distorsionado el Derecho a la Consulta, precepto que se ha convertido en un eje fundamental para la sobrevivencia de los pueblos indígenas en el continente, los que venimos siendo afectados por una ofensiva de las empresas extractivas y proyectos megaturísticos.
Las comunidades Garifunas de la Bahía de Tela asistieron a la recepción que se les brindó en Triunfo de la Cruz a los integrantes de la honorable Corte IDH y de la CIDH, los que escucharon con atención a todas las partes involucradas en el intrincado caso, para así emitir en un futuro cercano una sentencia que será paradigmática, ya que recopilará la jurisprudencia emitida por la Corte IDH en relación a los pueblos indígenas.
Entre los reclamos efectuado por la comunidad de Triunfo, es sobre el reconocimiento sobre playas (borde costero) y el territorio marítimo, ya que los títulos emitidos por el estado de Honduras, no reconocen las playas, las que forman parte esencial tanto de la economía Garifuna como de nuestra espiritualidad.
La Corte IDH y la CIDH visitarán además la comunidad de Punta Piedra, la que tiene un caso que espera su sentencia, ante la invasión promovida por un militar hace dos décadas al río Miel, paraje que forma parte del hábitat funcional de esa comunidad.
Cabe señalar que una reunión planificada para efectuarse en el Hotel TELAMAR, previo a la realizada en la Tela Rail Road Company, los Garifunas nos hicimos presentes y fue impedida nuestra entrada a las instalaciones, y recibimos un trato discriminatorio por parte de los guardias seguridad que nos impidieron verificar la presencia de los miembros de la Corte y la comisión que se encontraban hospedados en ese hotel.
La reunión fue efectuada en la antigua sede de la Tela Railroad Company, en donde hizo presencia, además, el grupo de trabajadores de la municipalidad de Tela, a los que les cancelaron sus prestaciones con 22 manzanas de tierra pertenecientes a la comunidad de Triunfo, generando un conflicto que ha sido utilizado para fomentar el racismo ya existente en la zona.
El alcalde de Tela, Mario Fuentes, en su intervención durante la reunión fue enfático en indicar que el racismo no existía en Tela, al mismo tiempo que acarreó en masa a los exempleados de la municipalidad de Tela, los que fueron engañados al recibir las 22 manzanas de tierra de Triunfo como pago por sus prestaciones laborales.
La visita a la comunidad de Triunfo incluyó Punta Izopo, lugar donde el fallecido palmero de la muerte, Miguel Facussé, instauró el Parque Nacional Punta Izopo, sin haber efectuado una consulta comunitaria, distorsionado el Derecho a la Consulta, precepto que se ha convertido en un eje fundamental para la sobrevivencia de los pueblos indígenas en el continente, los que venimos siendo afectados por una ofensiva de las empresas extractivas y proyectos megaturísticos.
Las comunidades Garifunas de la Bahía de Tela asistieron a la recepción que se les brindó en Triunfo de la Cruz a los integrantes de la honorable Corte IDH y de la CIDH, los que escucharon con atención a todas las partes involucradas en el intrincado caso, para así emitir en un futuro cercano una sentencia que será paradigmática, ya que recopilará la jurisprudencia emitida por la Corte IDH en relación a los pueblos indígenas.
Entre los reclamos efectuado por la comunidad de Triunfo, es sobre el reconocimiento sobre playas (borde costero) y el territorio marítimo, ya que los títulos emitidos por el estado de Honduras, no reconocen las playas, las que forman parte esencial tanto de la economía Garifuna como de nuestra espiritualidad.
La Corte IDH y la CIDH visitarán además la comunidad de Punta Piedra, la que tiene un caso que espera su sentencia, ante la invasión promovida por un militar hace dos décadas al río Miel, paraje que forma parte del hábitat funcional de esa comunidad.
Cabe señalar que una reunión planificada para efectuarse en el Hotel TELAMAR, previo a la realizada en la Tela Rail Road Company, los Garifunas nos hicimos presentes y fue impedida nuestra entrada a las instalaciones, y recibimos un trato discriminatorio por parte de los guardias seguridad que nos impidieron verificar la presencia de los miembros de la Corte y la comisión que se encontraban hospedados en ese hotel.
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