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| FIAN Honduras |
Por Marvin Palacios - Defensores en Línea
A las oficinas del Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH), se presentó José Santos Chávez Aranda para denunciar el asesinato de su hermano Gregorio Chávez, encontrado enterrado el pasado 6 de julio en uno de los predios de la finca Paso Aguán, propiedad del terrateniente Miguel Facussé.
Chávez Aranda dijo que decidió venir a COFADEH para poner la denuncia con demanda de justicia para su hermano Gregorio Chávez, porque no quiere que su muerte quede impune.
Añadió que desde que se conoció de la desaparición de Gregorio Chávez Aranda (el 2 de Julio 2012) “la primera reacción de la comunidad fue tomarse la finca, porque lo pedíamos vivo o muerto”.
Sin embargo tanto la policía como los guardias de seguridad les impidieron ingresar a la finca, fue hasta el viernes 5 de Julio alrededor de las 7:00 de la mañana, que “lo hallamos muerto, entonces esa fue la reacción de la comunidad y ahí están en la finca, pero también están miembros del ejército y la policía.
El denunciante que junto a la dirigencia del Movimiento Campesino Unificado del Aguán (MUCA) elevaron el lunes 9 de julio sus voces de protesta ante los medios de comunicación, dijo que en Radio Globo personeros de la empresa Dinant, propiedad de Miguel Facussé han procedido a desmentir las denuncias de la comunidad que señalan a los guardias de seguridad de ser los responsables de la muerte de Gregorio Chávez Aranda.
Cerca de la aldea Panamá, localizada en la margen izquierda y jurisdicción de Trujillo, en donde tenía su parcela de tierra Gregorio Chávez Aranda, se encuentran el Asentamiento San Isidro y otras, sobre las cuales existen amenazas de desalojo y “se piensa que nos van a sacar también a nosotros y van a ser violentados nuestros derechos y los de nuestro hermano”, denunció.
Agregó que desde la desaparición y asesinato de su hermano el ambiente ha sido una pesadilla, “el viernes que lo hayamos enterrado y cubierto con hojas de palma nos acompañaban hermanos de varias organizaciones, entre ellas FIAN Internacional, el Observatorio Internacional de Derechos Humanos y Derechos en Acción, ellos tienen todas las evidencias.
El mismo viernes a las 2:00 de la tarde, el cadáver de Gregorio Chávez fue trasladado a la ciudad de La Ceiba para practicarle una autopsia, el informe forense indicó que la víctima murió de múltiples golpes, su rostro estaba desfigurado.
“Ahí están las evidencias de cómo hayamos a mi hermano, cómo se encontraba, cuáles fueron las barbaries que le hicieron a mi hermano como si fuera un asesino y él cultivaba su tierra, en donde le fueron violentados sus derechos, él era delegado de la palabra de Dios durante 25 años y creo que la causa de su muerte viene más porque entraban terneritos de él a la propiedad del señor Facussé y el entraba para buscarlos, porque si no, los animales salían con las tripas de fuera”, reveló José Santos Chávez Aranda.
Consultado si esa situación hace suponer que los guardias de seguridad fueron los responsables de la muerte de su hermano, José Santos contestó que “sí, esos son los responsables, la voz de la comunidad así lo indica y no se sale de ahí, porque solo ellos entran ahí, ¿quiénes otros entran?.
Añadió que a Gregorio lo fueron a sepultar donde permanecen los guardias de seguridad, que es un sector en donde pelan vacas y entierran los cueros en terrenos arenosos y ¿cuántos más no habrá ahí?, es un cementerio clandestino que tienen ellos.
“Una gente profesional que llegue a examinar esa área ahí, encontrará gente enterrada, desde el tiempo que tienen de estar cuidando esos guardias, esa es la angustia y por eso no queremos y exigimos al señor Facussé que no queremos ver guardias, porque ellos violan, ahí violaron una mujer, la tuvieron una noche y así, les exigen a las mujeres de los hombres que intimiden, aunque el hombre vea, y si el hombre dice algo, ahí están las armas, esta es una tragedia bien ingrata lo que se está viviendo en esa comunidad”, denunció José Santos.
Apuntó que después de las 7:00 de la noche nadie puede andar cerca de la finca Paso Aguán, porque los guardias amenazan y agreden a los campesinos y campesinas.
“La comunidad por indignación tiene tomada la finca, han llegado los contingentes militares, porque tenemos tapada la calle de acceso, así estamos y permanecemos en zozobra porque la ley es para los ricos, los pobres no valemos nada, pero deseo yo en mi fe que tengo, llegar hasta las últimas consecuencias”, sostuvo José Santos.
Entre tanto José Cruz que acompañó a José Santos a la capital, expresó que Gregorio Chávez Aranda tenía cultivos de palma, naranjos y hortalizas y los comercializaba en forma independiente.
José Cruz dijo que don Gregorio fue raptado de su propiedad, ya que él se encontraba trabajando en sus predios, eso sucedió entre 5:00 y 6:00 de la tarde del 2 de Julio de 2012.
“Don Gregorio era solidario con todo mundo, muy buen amigo y se ve que él se había ganado a toda comunidad por su forma de ser”, recalcó.
“La comunidad ya no quiere que se permita la presencia de guardias de seguridad en la zona, porque si se perdió uno la primera vez, ya no va a ser uno, sino varios los que desaparecerán”, apuntó Cruz.
La aldea Panamá la componen más de 400 familias y sus habitantes se dedican a cultivar granos básicos y otras labores del campo. Actualmente, la comunidad Panamá no pertenece al Movimiento Campesino Unificado del Aguán (MUCA), pero pretende llegar a un acuerdo para pagar las tierras al terrateniente Miguel Facussé.
En los últimos días, 3 campesinos han sido asesinados pese a que en el mes de junio se firmó un acuerdo de financiamiento entre el Gobierno y el Movimiento Campesino Unificado del Aguán (MUCA) que pondría fin al conflicto de tierras en el Bajo Aguán.
Los campesinos asesinados son: Jacobo Erazo (30) encontrado muerto en el sector de Quebrada de Arena, luego el jueves 5 de julio se halló el cuerpo sin vida de Gregorio Chávez Aranda (69) y el domingo 8 de julio, 3 supuestos sicarios mataron a tiros a José Luis Dubón Díaz. cuando hacía un recorrido para juntarse con otros compañeros y viajar hacia El Progreso, Yoro y acudir a una reunión con el ministro del Instituto Nacional Agrario (INA), César Ham.
Dubón Díaz era miembro de la cooperativa La Lempira en el departamento de Colón y el 25 de junio pasado había sido detenido junto a otros campesinos en el puente Saopín de La Ceiba.
Durante varias horas estuvo retenido por agentes policiales al mando del Subcomisionado Ortíz.
Por otro lado, en el año 2011 en la finca Paso Aguán desaparecieron los campesinos Francisco Pascual López (37) del Movimiento Campesino de Rigores y José Antonio López Lara (43) de la aldea de Rigores, este último mientras pescaba en el río Aguán muy cerca de donde se encontró el cuerpo de Gregorio Chávez. Estos últimos campesinos nunca han sido encontrados, a pesar de las intensas búsquedas de sus compañeros porque nunca se les permitió buscarlos en la finca Paso Aguán.
Los vecinos de las comunidades de Panamá y Rigores denunciaron al Observatorio Internacional de Derechos Humanos destacado en Tocoa, Colón, que ya no aguantan las constantes amenazas a las que están siendo sometidos por parte de los guardias de seguridad de Miguel Facussé.
Sin embargo tanto la policía como los guardias de seguridad les impidieron ingresar a la finca, fue hasta el viernes 5 de Julio alrededor de las 7:00 de la mañana, que “lo hallamos muerto, entonces esa fue la reacción de la comunidad y ahí están en la finca, pero también están miembros del ejército y la policía.
El denunciante que junto a la dirigencia del Movimiento Campesino Unificado del Aguán (MUCA) elevaron el lunes 9 de julio sus voces de protesta ante los medios de comunicación, dijo que en Radio Globo personeros de la empresa Dinant, propiedad de Miguel Facussé han procedido a desmentir las denuncias de la comunidad que señalan a los guardias de seguridad de ser los responsables de la muerte de Gregorio Chávez Aranda.
Cerca de la aldea Panamá, localizada en la margen izquierda y jurisdicción de Trujillo, en donde tenía su parcela de tierra Gregorio Chávez Aranda, se encuentran el Asentamiento San Isidro y otras, sobre las cuales existen amenazas de desalojo y “se piensa que nos van a sacar también a nosotros y van a ser violentados nuestros derechos y los de nuestro hermano”, denunció.
Agregó que desde la desaparición y asesinato de su hermano el ambiente ha sido una pesadilla, “el viernes que lo hayamos enterrado y cubierto con hojas de palma nos acompañaban hermanos de varias organizaciones, entre ellas FIAN Internacional, el Observatorio Internacional de Derechos Humanos y Derechos en Acción, ellos tienen todas las evidencias.
El mismo viernes a las 2:00 de la tarde, el cadáver de Gregorio Chávez fue trasladado a la ciudad de La Ceiba para practicarle una autopsia, el informe forense indicó que la víctima murió de múltiples golpes, su rostro estaba desfigurado.
“Ahí están las evidencias de cómo hayamos a mi hermano, cómo se encontraba, cuáles fueron las barbaries que le hicieron a mi hermano como si fuera un asesino y él cultivaba su tierra, en donde le fueron violentados sus derechos, él era delegado de la palabra de Dios durante 25 años y creo que la causa de su muerte viene más porque entraban terneritos de él a la propiedad del señor Facussé y el entraba para buscarlos, porque si no, los animales salían con las tripas de fuera”, reveló José Santos Chávez Aranda.
Consultado si esa situación hace suponer que los guardias de seguridad fueron los responsables de la muerte de su hermano, José Santos contestó que “sí, esos son los responsables, la voz de la comunidad así lo indica y no se sale de ahí, porque solo ellos entran ahí, ¿quiénes otros entran?.
Añadió que a Gregorio lo fueron a sepultar donde permanecen los guardias de seguridad, que es un sector en donde pelan vacas y entierran los cueros en terrenos arenosos y ¿cuántos más no habrá ahí?, es un cementerio clandestino que tienen ellos.
“Una gente profesional que llegue a examinar esa área ahí, encontrará gente enterrada, desde el tiempo que tienen de estar cuidando esos guardias, esa es la angustia y por eso no queremos y exigimos al señor Facussé que no queremos ver guardias, porque ellos violan, ahí violaron una mujer, la tuvieron una noche y así, les exigen a las mujeres de los hombres que intimiden, aunque el hombre vea, y si el hombre dice algo, ahí están las armas, esta es una tragedia bien ingrata lo que se está viviendo en esa comunidad”, denunció José Santos.
Apuntó que después de las 7:00 de la noche nadie puede andar cerca de la finca Paso Aguán, porque los guardias amenazan y agreden a los campesinos y campesinas.
“La comunidad por indignación tiene tomada la finca, han llegado los contingentes militares, porque tenemos tapada la calle de acceso, así estamos y permanecemos en zozobra porque la ley es para los ricos, los pobres no valemos nada, pero deseo yo en mi fe que tengo, llegar hasta las últimas consecuencias”, sostuvo José Santos.
Entre tanto José Cruz que acompañó a José Santos a la capital, expresó que Gregorio Chávez Aranda tenía cultivos de palma, naranjos y hortalizas y los comercializaba en forma independiente.
José Cruz dijo que don Gregorio fue raptado de su propiedad, ya que él se encontraba trabajando en sus predios, eso sucedió entre 5:00 y 6:00 de la tarde del 2 de Julio de 2012.
“Don Gregorio era solidario con todo mundo, muy buen amigo y se ve que él se había ganado a toda comunidad por su forma de ser”, recalcó.
“La comunidad ya no quiere que se permita la presencia de guardias de seguridad en la zona, porque si se perdió uno la primera vez, ya no va a ser uno, sino varios los que desaparecerán”, apuntó Cruz.
La aldea Panamá la componen más de 400 familias y sus habitantes se dedican a cultivar granos básicos y otras labores del campo. Actualmente, la comunidad Panamá no pertenece al Movimiento Campesino Unificado del Aguán (MUCA), pero pretende llegar a un acuerdo para pagar las tierras al terrateniente Miguel Facussé.
En los últimos días, 3 campesinos han sido asesinados pese a que en el mes de junio se firmó un acuerdo de financiamiento entre el Gobierno y el Movimiento Campesino Unificado del Aguán (MUCA) que pondría fin al conflicto de tierras en el Bajo Aguán.
Los campesinos asesinados son: Jacobo Erazo (30) encontrado muerto en el sector de Quebrada de Arena, luego el jueves 5 de julio se halló el cuerpo sin vida de Gregorio Chávez Aranda (69) y el domingo 8 de julio, 3 supuestos sicarios mataron a tiros a José Luis Dubón Díaz. cuando hacía un recorrido para juntarse con otros compañeros y viajar hacia El Progreso, Yoro y acudir a una reunión con el ministro del Instituto Nacional Agrario (INA), César Ham.
Dubón Díaz era miembro de la cooperativa La Lempira en el departamento de Colón y el 25 de junio pasado había sido detenido junto a otros campesinos en el puente Saopín de La Ceiba.
Durante varias horas estuvo retenido por agentes policiales al mando del Subcomisionado Ortíz.
Por otro lado, en el año 2011 en la finca Paso Aguán desaparecieron los campesinos Francisco Pascual López (37) del Movimiento Campesino de Rigores y José Antonio López Lara (43) de la aldea de Rigores, este último mientras pescaba en el río Aguán muy cerca de donde se encontró el cuerpo de Gregorio Chávez. Estos últimos campesinos nunca han sido encontrados, a pesar de las intensas búsquedas de sus compañeros porque nunca se les permitió buscarlos en la finca Paso Aguán.
Los vecinos de las comunidades de Panamá y Rigores denunciaron al Observatorio Internacional de Derechos Humanos destacado en Tocoa, Colón, que ya no aguantan las constantes amenazas a las que están siendo sometidos por parte de los guardias de seguridad de Miguel Facussé.
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