Ante un lleno a reventar de la Plaza Juan Pablo II en Managua, el Presidente Daniel Ortega dijo hoy, en la celebración del 32 aniversario del derrocamiento de la dictadura de Anastasio Somoza, que gracias a Dios el pueblo tiene asegurado su presente y su futuro revolucionario y lo tiene asegurado porque ha logrado el milagro de la incorporación consiente de los jóvenes en la grandes batallas.
Dirigiéndose al fundador viviente del FSLN, Tomas Borge dijo que con la actual juventud sandinista habrá revolución para mucho tiempo.
Dirigiéndose al fundador viviente del FSLN, Tomas Borge dijo que con la actual juventud sandinista habrá revolución para mucho tiempo.
Ortega dijo que no presentaría su Plan de Gobierno, como se esperaba, como candidato presidencial del FSLN para los comicios generales del 6 de Noviembre, pero adelantó que se trata del mismo plan que se ejecuta actualmente desde el gobierno y que tiene que ser mejorado.
El mandatario propuso ante la multitud que debido a que Estados Unidos fue condenado por sus actos de guerra y terrorismo contra Nicaragua hace 25 años en la Corte Internacional de Justicia en La Haya, Holanda, y que se ordenó indemnizar a nuestro país, y dado que Nicaragua ha cumplido en las indemnizaciones que a pagado a ciudadanos norteamericanos confiscados en los años 80, pagando más de 500 millones de dólares, que Estados Unidos honre esa deuda de 17 mil millones de dólares y que no digan que no van a pagar.
Propuso convocar a un referéndum nacional y que el pueblo nicaragüense decida si se cobra o no a Estados Unidos por esa deuda a Nicaragua, para tramitarla formalmente ante La Haya.
Luego de hacer un recuento de las luchas guerrilleras sandinistas dijo que el triunfo se logró contra la Guardia Nacional por una insurrección total y nacional que le puso fin a una tiranía impuesta aquí por Estados Unidos.
Dijo que hoy por hoy Nicaragua forma una lucha con los trabajadores, los pequeños empresarios, los pequeños productores y otros sectores productivos que trabajan juntos para combatir la pobreza, la extrema pobreza y el hambre, que son los grandes retos de este tiempo.
Proclamó que el proyecto sandinista de Nicaragua, en un país donde un 60% son católicos y un 40% son evangélicos, se puede asumir que el 99% de los nicaragüenses somos cristianos y por tanto este proyecto es cristiano, socialista y solidario.
Con esto parecía responder a los cuestionamientos de los Obispos de la Conferencia Episcopal y particularmente del Obispo Auxiliar de Managua, Monseñor Silvio Báez, quien reclama que el estado es laico y por tanto el gobierno sandinista no debe proclamarse como cristiano.
Ortega dijo que si el FSLN no hubiese derrotado a la dictadura sandinista jamás hubiese ondeado con libertad la bandera azul y blanco de Nicaragua y que fue un proceso largo de luchas armadas y luchas políticas y muchos de sus fundadores y dirigentes guerrilleros que hoy no viven y son los héroes del partido rojinegro.
Dijo que la sangre derramada de los héroes sandinistas es santa, que se convirtió en ilusión y esperanza y que ahora es una realidad con el FSLN en el poder.
Criticó el capitalismo salvaje y a quienes los adoran como el becerro de oro.
Al referirse a la independencia de Estados Unidos de América proclamó que nosotros tenemos el derecho también se ser independientes y de crear los Estados Unidos de América Latina, al margen de Washington.
Entre otras cosas propuso públicamente a la Presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, que envíen una comisión conjunta de expertos ecologistas y ambientalistas para cuidar y proteger la zona de Harbour Head en disputa en la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
Al evento asistieron representantes de partidos políticos de izquierda de América.
El mandatario propuso ante la multitud que debido a que Estados Unidos fue condenado por sus actos de guerra y terrorismo contra Nicaragua hace 25 años en la Corte Internacional de Justicia en La Haya, Holanda, y que se ordenó indemnizar a nuestro país, y dado que Nicaragua ha cumplido en las indemnizaciones que a pagado a ciudadanos norteamericanos confiscados en los años 80, pagando más de 500 millones de dólares, que Estados Unidos honre esa deuda de 17 mil millones de dólares y que no digan que no van a pagar.
Propuso convocar a un referéndum nacional y que el pueblo nicaragüense decida si se cobra o no a Estados Unidos por esa deuda a Nicaragua, para tramitarla formalmente ante La Haya.
Luego de hacer un recuento de las luchas guerrilleras sandinistas dijo que el triunfo se logró contra la Guardia Nacional por una insurrección total y nacional que le puso fin a una tiranía impuesta aquí por Estados Unidos.
Dijo que hoy por hoy Nicaragua forma una lucha con los trabajadores, los pequeños empresarios, los pequeños productores y otros sectores productivos que trabajan juntos para combatir la pobreza, la extrema pobreza y el hambre, que son los grandes retos de este tiempo.
Proclamó que el proyecto sandinista de Nicaragua, en un país donde un 60% son católicos y un 40% son evangélicos, se puede asumir que el 99% de los nicaragüenses somos cristianos y por tanto este proyecto es cristiano, socialista y solidario.
Con esto parecía responder a los cuestionamientos de los Obispos de la Conferencia Episcopal y particularmente del Obispo Auxiliar de Managua, Monseñor Silvio Báez, quien reclama que el estado es laico y por tanto el gobierno sandinista no debe proclamarse como cristiano.
Ortega dijo que si el FSLN no hubiese derrotado a la dictadura sandinista jamás hubiese ondeado con libertad la bandera azul y blanco de Nicaragua y que fue un proceso largo de luchas armadas y luchas políticas y muchos de sus fundadores y dirigentes guerrilleros que hoy no viven y son los héroes del partido rojinegro.
Dijo que la sangre derramada de los héroes sandinistas es santa, que se convirtió en ilusión y esperanza y que ahora es una realidad con el FSLN en el poder.
Criticó el capitalismo salvaje y a quienes los adoran como el becerro de oro.
Al referirse a la independencia de Estados Unidos de América proclamó que nosotros tenemos el derecho también se ser independientes y de crear los Estados Unidos de América Latina, al margen de Washington.
Entre otras cosas propuso públicamente a la Presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, que envíen una comisión conjunta de expertos ecologistas y ambientalistas para cuidar y proteger la zona de Harbour Head en disputa en la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
Al evento asistieron representantes de partidos políticos de izquierda de América.
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