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| Foto Los Necios (cortesía) |
Por Revistazo.com
Gases lacrimógenos, agua tóxica, toletazos y hasta bala viva, formaron parte de la batalla campal que se desarrolló en diversas zonas del país. Los protagonistas, maestros, miembros de la Resistencia Nacional y los policías, quienes sin medir fuerza, arremetieron contra los manifestantes que desde tempranas horas mantuvieron tomadas algunas de las principales carreteras del país.
Lo anunciaron con anticipación y se cumplió; desde muy tempranas horas maestros y maestras salieron a las calles de Tegucigalpa, San Pedro Sula, Comayagua y Yoro, entre otras ciudades.
El objetivo: protestar contra la que denominan privatización de la educación, a través de la aprobación de la Ley de Incentivo a la Participación para el Mejoramiento de la Calidad Educativa y el rechazo a la comisión que nombró el gobierno de Lobo Sosa, ante el "descalabro" que vive actualmente el Instituto Nacional de Previsión del Magisterio –Inprema-.
Maestros, estudiantes, padres de familia, amas de casa, obreros, campesinos y demás organizaciones aglutinadas en el Frente Nacional de Resistencia Popular –FNRP- se hicieron presentes para manifestarse a través de plantones, marchas y la toma de puentes y carreteras.
No obstante, al filo del mediodía, las que iniciaron como manifestaciones pacíficas se fueron tornando en “batallas campales”. Al tenor de las balas que, hasta de fuego, les arrojaron los policías junto a los toletazos, los manifestantes sacaron palos y piedras.
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