Foto Gerardo Iglesias |
Descartado sistema de transporte de fruta colindante con el trabajo esclavo
Por Giorgio Trucchi | Rel-UITA
El pasado 2 de noviembre, tras un largo y accidentado proceso de negociación colectiva que duró 19 meses, el Sindicato de Trabajadores de la Industria del Banano y Agropecuaria y Empresas Afines (SITRAIBANA) y la transnacional bananera Chiquita Brands firmaron un nuevo Convenio Colectivo, que entrará en vigor a partir de enero 2015 y tendrá una duración de cuatro años.
El pasado 2 de noviembre, tras un largo y accidentado proceso de negociación colectiva que duró 19 meses, el Sindicato de Trabajadores de la Industria del Banano y Agropecuaria y Empresas Afines (SITRAIBANA) y la transnacional bananera Chiquita Brands firmaron un nuevo Convenio Colectivo, que entrará en vigor a partir de enero 2015 y tendrá una duración de cuatro años.
“Ha sido una negociación bien complicada, pero al final logramos llegar a un acuerdo. Pese a que el aumento salarial que obtuvimos no satisface nuestras expectativas, para nosotros lo más importante era detener la pretensión de la empresa de implementar prácticas de trabajo que atentan contra la salud y la dignidad de los trabajadores”, dijo a La Rel Abel Becker, secretario general del SITRAIBANA.
Desde 2005, Bocas Fruit Company (Chiquita) ha venido impulsando la idea de que los trabajadores bananeros de Bocas del Toro tengan que remplazar a los motores aéreos, que acarrean la fruta desde las plantaciones hasta las plantas empacadoras.
Esta nueva modalidad de trabajo, que la compañía frutera norteamericana denomina “abastecimiento de racimo continuo”, implicaría recorrer hasta unos dos kilómetros acarreando entre 20 y 25 racimos, que pueden pesar entre 120 y 150 libras (55 a 70 kilogramos) cada uno.
“Nos pusimos firmes sobre este punto y pedimos la mediación de las autoridades laborales, para que hicieran entrar en razón a la empresa. Hubiese sido irresponsable de nuestra parte aceptar prácticas de trabajo forzoso que ponen en riesgo la salud de los trabajadores”, explicó Becker.
Ante la intransigencia de Chiquita y el despliegue de una campaña para denigrar a la organización sindical, el SITRAIBANA dio como plazo el 4 de noviembre para que la empresa desistiera de su actitud cerrada.
“Afortunadamente, la compañía recapacitó y pudimos firmar el nuevo convenio. Sin embargo, esto no nos deja tranquilos. Sabemos que Chiquita no va a renunciar a un proyecto que está tratando de implementar en todos los países productores de banano de América Latina”, explicó en secretario general del SITRAIBANA.
En este sentido, Abel Becker agradeció el apoyo brindado por la Rel-UITA e hizo un llamado para que esté atenta, y evalúe la posibilidad de lanzar una campaña internacional, para exigir a Chiquita que siga respetando la legislación laboral y los convenio de la OIT ratificados por Panamá.
Desde 2005, Bocas Fruit Company (Chiquita) ha venido impulsando la idea de que los trabajadores bananeros de Bocas del Toro tengan que remplazar a los motores aéreos, que acarrean la fruta desde las plantaciones hasta las plantas empacadoras.
Esta nueva modalidad de trabajo, que la compañía frutera norteamericana denomina “abastecimiento de racimo continuo”, implicaría recorrer hasta unos dos kilómetros acarreando entre 20 y 25 racimos, que pueden pesar entre 120 y 150 libras (55 a 70 kilogramos) cada uno.
“Nos pusimos firmes sobre este punto y pedimos la mediación de las autoridades laborales, para que hicieran entrar en razón a la empresa. Hubiese sido irresponsable de nuestra parte aceptar prácticas de trabajo forzoso que ponen en riesgo la salud de los trabajadores”, explicó Becker.
Ante la intransigencia de Chiquita y el despliegue de una campaña para denigrar a la organización sindical, el SITRAIBANA dio como plazo el 4 de noviembre para que la empresa desistiera de su actitud cerrada.
“Afortunadamente, la compañía recapacitó y pudimos firmar el nuevo convenio. Sin embargo, esto no nos deja tranquilos. Sabemos que Chiquita no va a renunciar a un proyecto que está tratando de implementar en todos los países productores de banano de América Latina”, explicó en secretario general del SITRAIBANA.
En este sentido, Abel Becker agradeció el apoyo brindado por la Rel-UITA e hizo un llamado para que esté atenta, y evalúe la posibilidad de lanzar una campaña internacional, para exigir a Chiquita que siga respetando la legislación laboral y los convenio de la OIT ratificados por Panamá.
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