Ricardo Changala, asesor de Derechos Humanos del Sistema de Naciones Unidas en Nicaragua, habla sobre los problemas socioeconómicos de la nación y la libertad de expresión
"Nicaragua parte de una situación socioeconómica con muchas dificultades y con un proceso histórico complejo, lo que hace que hoy en buena parte de los indicadores el país tenga serios problemas".
Así percibe el asesor de Derechos Humanos del Sistema de Naciones Unidas en Nicaragua, Ricardo Changala, la posición en que se encuentra este país centroamericano.
A su juicio, "el salto a pegar es muy alto y el proceso es difícil", pues además de contar con instituciones débiles, Nicaragua tiene "una gran problemática social" y está demandada por estándares internacionales y nacionales, establecidos en su propia Constitución, muy arduos de alcanzar.
"En términos de derechos civiles y políticos, el punto de partida también es de gran complejidad porque es una nación con democracia joven que ha tenido en su historia sólo cuatro o cinco elecciones nacionales, una política cargada de conflictos internos, guerras, revolución y largos procesos dictatoriales. Sin embargo, tiene avances institucionales significativos en todas las áreas", reconoce Changala.
"Nicaragua parte de una situación socioeconómica con muchas dificultades y con un proceso histórico complejo, lo que hace que hoy en buena parte de los indicadores el país tenga serios problemas".
Así percibe el asesor de Derechos Humanos del Sistema de Naciones Unidas en Nicaragua, Ricardo Changala, la posición en que se encuentra este país centroamericano.
A su juicio, "el salto a pegar es muy alto y el proceso es difícil", pues además de contar con instituciones débiles, Nicaragua tiene "una gran problemática social" y está demandada por estándares internacionales y nacionales, establecidos en su propia Constitución, muy arduos de alcanzar.
"En términos de derechos civiles y políticos, el punto de partida también es de gran complejidad porque es una nación con democracia joven que ha tenido en su historia sólo cuatro o cinco elecciones nacionales, una política cargada de conflictos internos, guerras, revolución y largos procesos dictatoriales. Sin embargo, tiene avances institucionales significativos en todas las áreas", reconoce Changala.
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