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El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, dirigió este martes una
carta al secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, para
ratificar el apoyo de su gobierno al reconocimiento del Estado
palestino.
En este sentido, señaló que “se trata de acto de justicia” a
un pueblo que lleva “el sufrimiento del mundo”.
Chávez citó la obra del filósofo francés Gilles
Deleuze, La grandeza de Arafat, en donde dice “con el acento de la
verdad: La causa palestina es ante todo el conjunto de injusticias que
este pueblo ha padecido y sigue padeciendo”.
El presidente, inspirado en la mencionada frase, agregó que Palestina es una nación “permanente e indoblegable voluntad de resistencia que ya está inscrita en la memoria heroica de la condición humana. Voluntad de resistencia que nace del más profundo amor por la tierra”.
El presidente, inspirado en la mencionada frase, agregó que Palestina es una nación “permanente e indoblegable voluntad de resistencia que ya está inscrita en la memoria heroica de la condición humana. Voluntad de resistencia que nace del más profundo amor por la tierra”.
En la misiva
oficial el primer mandatario venezolano expresó que “duele e indigna”
que quienes padecieron uno de los más grandes genocidios de la historia
“se hayan convertido en verdugos del pueblo palestino”.
“Indigna, a secas, que el sionismo siga haciendo uso del chantaje del antisemitismo contra quienes se oponen a sus atropellos y a sus crímenes. Israel ha instrumentalizado e instrumentaliza, con descaro y vileza, la memoria de las víctimas. Y lo hace para actuar, con total impunidad, contra Palestina”, reza la misiva.
“Indigna, a secas, que el sionismo siga haciendo uso del chantaje del antisemitismo contra quienes se oponen a sus atropellos y a sus crímenes. Israel ha instrumentalizado e instrumentaliza, con descaro y vileza, la memoria de las víctimas. Y lo hace para actuar, con total impunidad, contra Palestina”, reza la misiva.
Chávez llamó a no
olvidar que el pueblo palestino “el que padece la limpieza étnica
practicada por el Estado colonialista israelí”.
“Quiero que se me entienda: una cosa es rechazar al antisemitismo, y otra muy diferente aceptar pasivamente que la barbarie sionista le imponga un régimen de apartheid al pueblo palestino. Desde un punto de vista ético, quien rechaza lo primero, tiene que condenar lo segundo”, exhortó.
Actualmente, sostuvo, es cada vez más la cantidad de personas consciente que, “en el propio Israel, se opone abiertamente al sionismo y a sus prácticas terroristas y criminales”.
También se refirió a Golda Meir y reiteró que “el sionismo, como visión del mundo, es absolutamente racista”.
Asimismo, instó a recordar que desde finales del siglo XIX, el propio sionismo planteó el retorno del pueblo judío a Palestina “y la creación de un Estado nacional propio”. Esta iniciativa era “funcional al colonialismo francés y británico, como lo sería después al imperialismo yanqui”, destacó.
“Quiero que se me entienda: una cosa es rechazar al antisemitismo, y otra muy diferente aceptar pasivamente que la barbarie sionista le imponga un régimen de apartheid al pueblo palestino. Desde un punto de vista ético, quien rechaza lo primero, tiene que condenar lo segundo”, exhortó.
Actualmente, sostuvo, es cada vez más la cantidad de personas consciente que, “en el propio Israel, se opone abiertamente al sionismo y a sus prácticas terroristas y criminales”.
También se refirió a Golda Meir y reiteró que “el sionismo, como visión del mundo, es absolutamente racista”.
Asimismo, instó a recordar que desde finales del siglo XIX, el propio sionismo planteó el retorno del pueblo judío a Palestina “y la creación de un Estado nacional propio”. Esta iniciativa era “funcional al colonialismo francés y británico, como lo sería después al imperialismo yanqui”, destacó.
“Occidente alentó y apoyó, desde siempre, la ocupación sionista de Palestina por la vía militar”, señala en el texto.
El
presidente Chávez rememoró en la misiva enviada a Ban Ki-moon que en la
segunda década del siglo XX, el Estado sionista, “aprovechando la
ocupación colonial británica de Palestina, comenzó a desarrollar su
proyecto expansionista. Al concluir la Segunda Guerra Mundial, se
exacerbaría la tragedia del pueblo palestino, consumándose la expulsión
de su territorio y, al mismo tiempo, de la historia”.
En el año 1947, la “ominosa e ilegal” resolución 181 de la ONU recomendó la división de Palestina: “en un Estado judío, un Estado árabe y una zona bajo control internacional (Jerusalén y Belén)”. ,
Calificó de descaro que el “56 por ciento del territorio” se le haya otorgado al sionismo para la creación de su Estado.
La mencionada “resolución violaba el derecho internacional y desconocía flagrantemente la voluntad de las grandes mayorías árabes: el derecho de autodeterminación de los pueblos se convertía en letra muerta”.
En el año 1947, la “ominosa e ilegal” resolución 181 de la ONU recomendó la división de Palestina: “en un Estado judío, un Estado árabe y una zona bajo control internacional (Jerusalén y Belén)”. ,
Calificó de descaro que el “56 por ciento del territorio” se le haya otorgado al sionismo para la creación de su Estado.
La mencionada “resolución violaba el derecho internacional y desconocía flagrantemente la voluntad de las grandes mayorías árabes: el derecho de autodeterminación de los pueblos se convertía en letra muerta”.
Finalmente,
el jefe de Estado venezolano se dirigió al secretario general de la ONU
y criticó la advertencia de Estados Unidos de vetar la iniciativa
palestina.
“Se seguirá llamando Palestina: ¡Palestina vivirá y vencerá! ¡Larga vida a Palestina libre, soberana e independiente!”.
“Se seguirá llamando Palestina: ¡Palestina vivirá y vencerá! ¡Larga vida a Palestina libre, soberana e independiente!”.
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