A 5 años de su siembra
Por Alba TV
Un gigante, visionario, apasionado, estratega y comunicador innato, un hombre insigne que marcó hito en la historia contemporánea de Venezuela y dejó una huella indeleble en el mundo, por su gran sensibilidad humana; por su sueño de unir a América y El Caribe en uno solo como también lo quiso el Padre de la Patria, Simón Bolívar.
Barinés de nacimiento, con tricolor patrio en las venas y el arpa, cuatro y maracas en el corazón, así fue Hugo Chávez, un romántico, un emprendedor, un soñador, un líder que encabezó una Revolución que cambió al país, al pueblo venezolano, a Nuestramérica y al mundo entero. Unos se identificaron con su proyecto de Nación soberana, libre e independiente, otros fueron sus detractores, pero nadie puede negar su grandeza, su tenacidad y su amor por la Patria que le vio nacer.
Hablar de Hugo Chávez, es hacer referencia a la inclusión y justicia social; a las voces de los pobres, los indígenas, los negros, afrodescendientes y sexodiversos; de los históricamente excluidos. Hablar de Hugo Chávez, es hablar de las comunas y la organización popular; de los movimientos sociales; de la Revolución y su rostro de mujer; de la igualdad de género; de la Revolución feminista; del ciudadano consciente; de la lucha incansable por consolidar la Venezuela Potencia y Socialista.
Su visión de futuro no apuntaba solamente a la transformación de nuestro país, iba mucho más allá, apuntaba hacia el despertar de los pueblos para la construcción de un mundo multicéntrico y pluripolar, sin hegemonías ni imperios; donde los humildes pudieran ser escuchados, un mundo mejor y sobre todo más humano.
Hoy, a cinco años de su siembra, Alba TV rememora el legado de Chávez, el inmortal, el mismo que dio su vida por nuestra Patria, para que las nuevas generaciones tuvieran un destino distinto, un futuro prometedor con la mayor suma de felicidad posible.
Comuna o nada
Ángel Prado de la Comuna El Maizal en el estado Lara, recuerda cuál es la razón de ser del chavismo y del revolucionario.“Hugo Chávez no se fue de este mundo diciendo voten por el PSUV (Partido Socialista Unido de Venezuela), Chávez no se fue de este mundo diciendo sean esclavos del reformismo, no se fue de este mundo diciendo apoyen a los que tienen 30 años gobernando estas tierras y que de la derecha saltaron al chavismo y que están enquistados porque tienen amigos allá, Chávez se fue de este mundo despidiéndose y dejándonos un mensaje claro: Comuna o Nada”.
Enaltece el legado del Líder Supremo al tiempo que insta al pueblo revolucionario a aplicar el “chavismo verdadero”.
“El chavismo verdadero es el que se mete donde está el agricultor que no tiene financiamiento por ser pequeño agricultor, el chavismo verdadero es donde está ese joven que está planificando irse del país porque aquí no consigue una fuente de empleo; el chavismo verdadero es meterse dónde está ese compañero que no consigue a veces ni para comer”, reflexiona Prado.
Una Revolución feminista de transformación social
Gioconda Mota Gutiérrez, activista en el área de Derechos Humanos de las mujeres y personas con discapacidad; docente e investigadora, recuerda a Hugo Chávez como el líder que “logró la transformación de la Patria y que nos hizo partícipes de ese proceso nacional”.
Considera que esa transformación es uno de los aspectos más importantes del liderazgo y del impacto del proceso revolucionario que “logró hacer en una buena parte de nuestra sociedad venezolana y desde distintos espacios del poder popular, desde el debate, desde los espacios institucionales, desde el propio ejercicio de gobierno. Chávez fue como un huracán, un puente que posibilitó que muchas mujeres y hombres venezolanos colocáramos nuestro esfuerzo y lucha en una vía alterna al capitalismo salvaje y creo que eso fue dejando muchos frutos en nuestro país sobre todo en lo referente a la organización social; a la implementación de políticas públicas que transformaran importantísimos niveles de desigualdad heredados”.
Asegura que luego de transcurridos estos 5 años de su siembra, ese legado que dejó Chávez es un norte a retomar porque en la actualidad se ha ido desdibujando. “En la medida en que han pasado los años, en que se han agudizado los procesos de deterioro de nuestro país, la guerra económica; la operación psicológica; las propias debilidades del Gobierno en la conducción del proceso y en el enfrentamiento de esta guerra, el estar ahí justamente en ese proceso de enfrentamiento junto al pueblo que ha sido realmente debilitado, yo creo que la mira hoy es cómo retomar el rumbo que Chávez sembró”.
Mota indica que para mantener vivo el legado del Comandante Chávez se debe “recuperar la conexión real con el pueblo, desde una perspectiva protagónica, si había algo importante de Chávez con relación al nexo con el pueblo y ha ese proceso transformador con sus debilidades, sus dificultades y con sus errores, era que había una conexión muy profunda entre lo que se impulsaba como Gobierno revolucionario y el proceso de construcción de autonomía, del poder popular, de incorporar al pueblo organizado en las decisiones y en los aspectos de construcción y desarrollado del país desde la mirada de nosotros mismos, desde los de abajo, mirado desde los espacios organizativos del pueblo”.
La activista revolucionaria destaca la importancia de rescatar y retomar con fuerza todo lo heredado por Hugo Chávez, ya que a su juicio “ha habido un distanciamiento del proceso de Gobierno, de la fortaleza con la que se venían impulsando las acciones de organización y construcción del poder popular”.
Por ello, afirma que “se debe remirar muchas de las políticas que se están implementando que tienen un carácter muy unilateral y que no necesariamente están fortaleciendo esa línea que se venía trabajando en el fortalecimiento del poder popular y además de no echar atrás las conquistas sociales logradas en lo que se refiere a la ruptura de la desigualdad”.
Reconoce la adversa situación económica que atraviesa el país pero a su vez asevera que hay procesos sustantivos que han sufrido retrocesos, sobre todo lo relacionado con “la superación de desigualdades; la pobreza y procesos del ámbito social en todas las dimensiones de la vida, en donde no hemos logrado soluciones conjuntamente con la participación protagónica del pueblo. Para seguir de la mano en la construcción del socialismo debe retomarse lo que trazó Chávez sociopolíticamente”, resalta.
Para esta mujer revolucionaria, las mujeres tienen un rol protagónico en toda esta transformación, gracias a la inclusión y visibilización que le dio Chávez, pero también al despertar de la consciencia.
Recuerda que una de las cosas más importantes que ocurrió con Chávez en el poder fue la apertura, como se le dio voz a las mujeres luchadoras, feministas, “Chávez se reconoció como feminista, invitar a la estructura de poder que le rodeaba y asumir el socialismo como un proceso feminista y que eso a su vez se le suma el impulso de políticas públicas que iban desde promover espacios organizativos de la mujeres en todas las dimensiones, en lo territorial, en los aspectos propios de las mujeres, que implicaba fomentar esa institucionalidad que brindara servicios de atención, en todas esas dimensiones ha habido o parálisis o retrocesos en los últimos años y la verdad es que retomar ese legado implica retomarlo desde una perspectiva protagónica esa fuerza que se le dio a la visibilidad de la mujer más allá de la retórica, a la visibilidad e inclusión de la mujer en el proceso revolucionario; por un lado de transformación social del país, que va mucho más allá de solamente reconocer el hecho que la mujer somos mayoría sino a la concreción de aspectos normativos, en términos de política y cultural que transforman la violencia contra la mujer, que transforman la desigualdad desde aspectos como el ejercicio del poder, somos la mayoría pero en lo concreto no somos la mayoría en el poder, apenas somos 7% en las Alcaldías; 12% en las Gobernaciones, en todos últimos años es donde ha habido menos del 20% de las mujeres en todos los cargos del Ejecutivo que tiene que ver con el ejercicio de toma de decisiones, ser partícipe de la conducción del país desde una perspectiva de género que implica luchar y no solo que podamos estar en esos espacios, sino que las mujeres puedan encaminar cosas que cambien la realidad opresiva de las mujeres: la violencia que está culturalmente instauradas en nuestra sociedad que van desde lo político hasta lo familiar y doméstico; así como lo que tiene que ver con el goce pleno de derechos no reconocidos aún como los derechos sexuales y reproductivos; la autonomía de la mujer a decidir sobre su cuerpo; el derecho a tener acceso a educación sexual liberadora que permita afrontar problemáticas como el embarazo adolescente; el acceso a anticonceptivos; la maternidad no deseada; la maternidad forzada”.
Mota refiere que todos esos elementos tienen que ver con aspectos normativos no conquistados, “porque pasamos de ser un feminismo revolucionario, somos un socialismo feminista que apuesta a ello pero eso se traduce en aspectos concretos que impactan en la masa de mujeres del país, entonces retomar ese legado de Chávez implica justamente comenzar a avanzar, detener la parálisis que ha habido en el país, retomar nuestra dirección para que esas conquistas se recuperen, se consoliden y se expandan”.
En cuanto al papel de la mujer revolucionaria enfatiza que debe haber organización, visibilidad y corresponsabilidad, “hay que mantener activa la presencia de las mujeres en los espacios de participación social pública y política y por otro lado hay que aumentar los niveles de exigibilidad, yo creo que si efectivamente algunas y algunos consideramos que se ha perdido el foco entre la acción del Estado de la mano del poder popular en función de las conquistas, le corresponde al poder popular y a los movimientos sociales aumentar la exigibilidad hacia nuestro propio Gobierno para que dé respuesta y se tomen acciones que visibilicen las problemáticas, porque no es suficiente con la retórica del bienestar sino que es importante hacer ver donde estamos retrocediendo o donde aún no hemos tenido conquistas o donde haya aspectos todavía que deban adaptarse”.
La activista y luchadora social por los derechos de las mujeres y de las personas con discapacidad manifiesta que ante la desesperanza que reina en la actualidad en el pueblo se debe seguir apostando a las soluciones colectivas.
“Si algo no debe permitirnos a las y los revolucionaros en esta batalla tan profunda que ha habido contra nosotros, que se acentúa cada vez más y está produciendo importantes niveles de depresión y de desilusión social que no son tan visibilizados pero que están ahí presentes, porque hay problemáticas muy concretas que son consecuencia de esa operación psicológica, de esta guerra económica sumada a todo aspectos que tienen que ver con ver hasta qué punto el estado está dando la respuesta más oportunas en esta batalla que en el pueblo, en la gente en aspectos que son la cotidianidad de nuestra vida, como la dificultad para comer; para proveernos de productos higiénicos; la dificultad para movilizarnos con la crisis que hay en el transporte; lo relacionado con los nexos familiares frente a una migración que es real y cada vez es más contundente hacia fuera del país, que es un problema que atraviesa las clases sociales, que atraviesa las orientaciones política- ideológicas, no se puede seguir diciendo que se van los opositores exclusivamente. Frente a esas problemáticas que están afectando los aspectos tangibles y esenciales de la vida de las y los venezolanos, yo considero que seguir apostando a soluciones colectivas a soluciones organizativas comunes, a espacios de enfrentamiento de esas realidades no desde la individualidad, porque hay una intencionalidad de que este deterioro tan profundo nos recoja y nos esconda en el individualismo, nos lleve a lo profundo de ese pensamiento neoliberal que es el sálvese quien pueda, que cada quien resuelva por su lado, por eso creo que la única manera de enfrentar todo eso desde la perspectiva socialista es desde los valores comunes, buscando soluciones colectivas que nos permitan enfrentar de manera más solidaria todo lo que estamos viviendo”.
De manera de crítica constructiva, Mota Gutiérrez enfatiza que a fin de minimizar el impacto de la crisis que atraviesa el país y que afecta al pueblo venezolano “el Estado debe mirar con más transparencia la gravedad del deterioro que estamos viviendo en materia alimentaria, de salud y de movilización y trazar rutas de atención de estos problemas en el marco de esta guerra que no sean tan ajenos a la verdadera solución, como determinadas reparticiones que terminan acentuando los procesos de desigualdad; que si pueden ayudar a apaliar algunas problemáticas de un porcentaje de la población pero no atiende el problema de fondo, con soluciones más colectivas miradas conjuntamente con el pueblo”.
Mota apuesta por lo común, lo colectivo y hasta en lo espiritual debe reinar, “que quienes creemos en este proceso, que los comunes nos juntemos y quienes aún tenemos esperanza sigamos luchando y sigamos buscando la posibilidad de enfrentar la coyuntura y no dejemos de mirar hacia adelante, no dejemos de mirar el horizonte político más allá del presente y la única manera de no perder esa mirada es manteniendo un diálogo y una actuación política entre los comunes, con todas esas herramientas que nos dejó el Comandante Chávez”, resalta.
Define a Chávez como transformación y afirma que el mejor aprendizaje que como pueblo es ubicarnos como un todo, “pero también es cierto que en ese todo hay desigualdades en las posibilidades de la conducción socio- política de un país, si todos somos Chávez pero la elit que está al frente del ejercicio de Gobierno tiene mayor responsabilidad en la posibilidad de obtener resultados de la mano con el pueblo porque está teniendo control del aparato que permite el impulso de esas transformaciones, si Chávez somos todos pero hay mayor responsabilidad en unos que en otros”.
Expresa su gratitud al Comandante Chávez por tanto amor, “yo le diría a 5 años de su partida, Gracias, gracias, gracias, a título más personal y humano es uno de los agentes transformadores de mi vida más importantes, le agradezco a la vida profundamente por haber tenido la oportunidad de vivir este momento histórico de nuestro país, incluso en medio de la complejidad que estamos ahora, Chávez no solo fue el líder que necesitaba el proceso para el despertar del pueblo venezolano y que ahorita están tratando de adormecerle, Chávez tuvo un impacto muy profundo en Latinoamérica y el mundo, la fuerza de Chávez es algo que se agradece, por eso a quienes estuvieron más cerca de él yo les diría que remiraran ese legado, remirar sus estrategias políticas de fondo que fueron trazadas y que muchos nos identificamos con ellas y nos enrumbamos en este camino, tener la humildad de volver la mirada atrás y tratar de recuperar algunas de esas prácticas o mejorarlas de cara al presente que es tan complejo”.
Para Mota Hugo Chávez fue la transformación el despertar del pueblo venezolano, “transformación, igualdad, esas son las palabras más profundas que me llevan a Chávez, él era movimiento, fuerza en acción transformadora continua, Chávez era una avalancha hacia adelante, con esperanza, con alegría, con fuerza, era símbolo de transformación desde la esperanza2.
Poder popular organizado: un sueño colectivo de dignidad y esperanza
José Enrique Solórzano Morales, mejor conocido como Yoda, de la Casa de Movimientos Culturales La Minka en la parroquia Altagracia en Caracas, y miembro del movimiento Comunidades al Mando Nuestramérica, luchador social, chavista y revolucionario trabaja por la continuidad del legado de Hugo Chávez, lucha cada día junto a la comunidad organizada para concretar sueños colectivos, para desde la cultura y el poder popular hacer Revolución.
Para Yoda, el principal legado de Chávez fue la dignidad, “rescató la dignidad de un pueblo explotado, oprimido, fruto de una invasión colonial, de una arremetida voraz del capitalismo para convertirnos en colonia, Chávez nos sacó de esa miseria y nos levantó la mirada al frente y nos enseño a mirarnos con dignidad ante el mundo. Y esa dignidad además estuvo acompañado por el amor a la Patria para construir un modo de vida distinto al del capital, al de la explotación, a transgredir todas las relaciones desde el punto de vista- organizativo, dirigentes- dirigidos; profesores- estudiantes; trabajador- patrono; nos levantó la esperanza de sueños que se han contratado en el horizonte a través del reencuentro, repensándonos como individuo, como comunidad, como Patria”.
En cuanto a la organización popular y a las comunas, este revolucionario asegura que fue otro de los sueños concretados por el Comandante Chávez, “la comuna es el sueño al que aspiramos todos los que negamos las relaciones sociales del capital, hacia eso vamos, hacia un nuevo modelo de sociedad, un nuevo modelo de relaciones sociales, que contrarresten el modelo explotador, genocida que ha sido el capitalismo donde las riquezas permanecen en las manos de unos pocos y donde el desarrollo productivo, cultural, tecnológico de una Nación se van a los bolsillos individuales, en vez de al desarrollo social y productivo de la colectividad. El Comandante Chávez nos dejó una tarea enorme que fue construir comunas, pueblo organizado, auto organizado y en esa tarea estamos a diario, construyendo relaciones sociales basadas en la solidaridad, el respeto mutuo, en el control de nuestros territorios comunales”.
Este comunero asegura que el legado de Chávez sigue vivo y multiplicándose, “a 5 años de su partida, con todos los embates que ha vivido Venezuela, seguimos resistiendo en pie de lucha, la unidad del pueblo revolucionario a través del liderazgo del presidente Nicolás Maduro es una realidad, y seguimos aquí el pueblo subversivo, insurgente y revolucionario dando la batalla, creando comunas y espacios para hacer política desde abajo, haciendo Revolución. A 5 años de su siembra sigue creciendo esa plántula que él nos dejó que va a dar sus frutos y sus semillas para la construcción de una Patria nueva”.
Destaca que el legado de Chávez no debe quedar en la retórica y que se debe avanzar en la concreción de la organización popular con miras a consolidar los ámbitos productivos, culturales, políticos, comunicacionales para profundizar el socialismo como modelo de proyecto país incluyente y de justicia social.
“En este avance haremos irreversible la Revolución, haremos que la Revolución no sea un problema de gobierno, sino un proceso concreto, una realidad construida por el pueblo. Nos toca a nosotros, al poder popular, al pueblo organizado seguir avanzando para ser irreversible e indestructible nuestro proceso revolucionario que no solo es un compromiso con el Comandante Chávez, sino un compromiso histórico con nuestra Patria y con nuestro pueblo, desde Bolívar, nuestros indígenas, el cimarronismo, desde las rebeliones populares de Ezequiel Zamora, el Taita Boves, desde ahí venimos arrastrando una lucha histórica por la dignidad, por reconocer nuestra autonomía y determinación y con Chávez esa lucha la convertimos en poder para el pueblo”, apunta.
Con relación a los logros y avances del poder popular organizado afirma que son muchas las conquistas, “El poder popular organizado es el que sostiene aguas abajo este proceso, nosotros creemos que si esto sigue en pie no es producto de políticas de Estado, no es producto de las acciones gubernamentales, ni mucho menos producto de políticas de partidos, esto es producto de este pueblo noble que sigue trabajando, que sintió el llamado de Chávez y de manera propia ha venido autogobernándose, autoorganizándose, y ha generado soluciones concretas que nuestro país necesita, produciendo a la necesidad de su comunidad; comunicándose a la necesidad de su comunidad, llámense organizaciones políticas, Consejos Comunales, comunas, Empresas de Propiedad Social, Clap, Movimientos sociales y populares y son expresiones del poder popular organizado que tiene un fin que es hacer frente al imperio, consolidar la Revolución desde la lógica no de quién gobierna sino desde la lógica del pueblo con el poder y el pueblo gobernando con sus capacidades”.
“Amor” es el sentimiento sublime que a José Enrique Solórzano le inspira Hugo Chávez, su amor por la Patria, por su pueblo, por su justicia para los históricamente excluidos, con orgullo asegura que las y los comuneros junto al pueblo organizado pueden decir a 5 años de la siembra del Líder de la Revolución Bolivariana: “Comandante Chávez te estamos cumpliendo”.
Chávez nos dejó todo
“Apostando a la transformación de la mujer y el hombre nuevo, con el Plan de la Patria y su legado Chávez nos dejó todo: la libertad, la Patria, el amor, su vida y la esperanza para un pueblo”, así lo expone Iriam Machado, enfermera en el Centro de Diagnóstico Integral, CDI, ubicado en Lídice, en la parroquia capitalina de La Pastora.
Para esta mujer luchadora y revolucionaria, “el Comandante Supremo fue la luz de un pueblo ávido de un cambio que llegó con un por ahora y se quedó para siempre”.
Refiere que “ese legado trasciende la educación gratuita y de calidad con las Misiones sociales Robinson, Rivas y Sucre, con las aldeas universitarias; la salud con Barrio Adentro; la alimentación; Chávez nos dejó la libertad, la soberanía y sembró en nosotros el amor por la Patria, nuestra identidad como nación socialista y revolucionaria; nos dio su vida para que nosotros siguiéramos su enseñanza, su legado y nuestros hijos y nietos conocieran su obra de amor para las y los venezolanos”.
Para Machado Chávez es sinónimo de esperanza, “porque aún en los tiempos difíciles, la solución no es irse del país, es construir en colectivo, es asumir nuestra responsabilidad como hijos de Bolívar y Chávez, es luchar día tras día, trabajar, perseverar y no decaer ante las adversidades”.
Agradece al líder de la Revolución Bolivariana por todo su amor, porque le abrió los ojos a una nueva forma de mirar la vida, el mundo y conocer una alternativa distinta para vivir en comunidad, para ayudar a otros, para avanzar juntos en la construcción de un nuevo modelo de país distinto al capitalismo.
“Hoy a 5 años de su siembra, le diría a Chávez con todo mi corazón que lo amo, que nos hace muchísima falta, pero que aquí estamos rodilla en tierra sus hijos para continuar con su lucha, con su legado para conquistar la victoria junto a nuestro presidente Nicolás Maduro, porque la Revolución Bolivariana está aquí para rato, no hemos decaído con toda esta guerra económica que nos tienen, seguimos luchando y seguiremos venciendo porque así lo quiso él, nuestro líder, nuestro presidente, nuestro Gigante”, expresa con sentimiento está enfermera de 55 años de edad que día tras día atiende con amor a los pacientes que llegan al CDI de Lídice.
Y se hizo millones
Chávez se convirtió en pueblo, y que cada uno de nosotros debe ser Chávez. Su gran legado, fue darnos las herramientas para que cada una de nuestras manos pudiera convertirse en protagonista de la construcción de una Patria de inclusión y justicia social.
Ese Chávez que moribundo se lanzó a la calle a ganar su última elección, fue el líder que antepuso a su pueblo a su propio ser. Ese es nuestro legado: por eso las voces de los movimientos sociales, de las mujeres luchadoras, de los hombres resteados, por el desarrollo de una nueva conciencia social es el mayor homenaje que le podemos rendir a un lustro de su siembra.
Al morir se convirtió en millones, millones que estamos obligados a luchar por cambiar los procesos burgueses y la mentalidad egoísta, por un sentimiento de amor, solidaridad, justicia y equidad, de ese aprendizaje que nos dejó Chávez, quien enseñó con la práctica la igualdad tomándose el cafecito con el hombre de la calle, en una de las columnas del Silencio, que inculcó el sentir patrio, independiente y soberano con su banda presidencial al firmar el paquete legal que el pueblo revolucionario debe convertir en su genética sanguínea para darle a sus hijos y nietos una Patria, con mayúscula, impregnada por el amor y la entrega de ese Gigante, para asegurar que su sacrificio ha valido la pena.
Por Alba TV
Un gigante, visionario, apasionado, estratega y comunicador innato, un hombre insigne que marcó hito en la historia contemporánea de Venezuela y dejó una huella indeleble en el mundo, por su gran sensibilidad humana; por su sueño de unir a América y El Caribe en uno solo como también lo quiso el Padre de la Patria, Simón Bolívar.
Barinés de nacimiento, con tricolor patrio en las venas y el arpa, cuatro y maracas en el corazón, así fue Hugo Chávez, un romántico, un emprendedor, un soñador, un líder que encabezó una Revolución que cambió al país, al pueblo venezolano, a Nuestramérica y al mundo entero. Unos se identificaron con su proyecto de Nación soberana, libre e independiente, otros fueron sus detractores, pero nadie puede negar su grandeza, su tenacidad y su amor por la Patria que le vio nacer.
Hablar de Hugo Chávez, es hacer referencia a la inclusión y justicia social; a las voces de los pobres, los indígenas, los negros, afrodescendientes y sexodiversos; de los históricamente excluidos. Hablar de Hugo Chávez, es hablar de las comunas y la organización popular; de los movimientos sociales; de la Revolución y su rostro de mujer; de la igualdad de género; de la Revolución feminista; del ciudadano consciente; de la lucha incansable por consolidar la Venezuela Potencia y Socialista.
Su visión de futuro no apuntaba solamente a la transformación de nuestro país, iba mucho más allá, apuntaba hacia el despertar de los pueblos para la construcción de un mundo multicéntrico y pluripolar, sin hegemonías ni imperios; donde los humildes pudieran ser escuchados, un mundo mejor y sobre todo más humano.
Hoy, a cinco años de su siembra, Alba TV rememora el legado de Chávez, el inmortal, el mismo que dio su vida por nuestra Patria, para que las nuevas generaciones tuvieran un destino distinto, un futuro prometedor con la mayor suma de felicidad posible.
Comuna o nada
Ángel Prado de la Comuna El Maizal en el estado Lara, recuerda cuál es la razón de ser del chavismo y del revolucionario.“Hugo Chávez no se fue de este mundo diciendo voten por el PSUV (Partido Socialista Unido de Venezuela), Chávez no se fue de este mundo diciendo sean esclavos del reformismo, no se fue de este mundo diciendo apoyen a los que tienen 30 años gobernando estas tierras y que de la derecha saltaron al chavismo y que están enquistados porque tienen amigos allá, Chávez se fue de este mundo despidiéndose y dejándonos un mensaje claro: Comuna o Nada”.
Enaltece el legado del Líder Supremo al tiempo que insta al pueblo revolucionario a aplicar el “chavismo verdadero”.
“El chavismo verdadero es el que se mete donde está el agricultor que no tiene financiamiento por ser pequeño agricultor, el chavismo verdadero es donde está ese joven que está planificando irse del país porque aquí no consigue una fuente de empleo; el chavismo verdadero es meterse dónde está ese compañero que no consigue a veces ni para comer”, reflexiona Prado.
Una Revolución feminista de transformación social
Gioconda Mota Gutiérrez, activista en el área de Derechos Humanos de las mujeres y personas con discapacidad; docente e investigadora, recuerda a Hugo Chávez como el líder que “logró la transformación de la Patria y que nos hizo partícipes de ese proceso nacional”.
Considera que esa transformación es uno de los aspectos más importantes del liderazgo y del impacto del proceso revolucionario que “logró hacer en una buena parte de nuestra sociedad venezolana y desde distintos espacios del poder popular, desde el debate, desde los espacios institucionales, desde el propio ejercicio de gobierno. Chávez fue como un huracán, un puente que posibilitó que muchas mujeres y hombres venezolanos colocáramos nuestro esfuerzo y lucha en una vía alterna al capitalismo salvaje y creo que eso fue dejando muchos frutos en nuestro país sobre todo en lo referente a la organización social; a la implementación de políticas públicas que transformaran importantísimos niveles de desigualdad heredados”.
Asegura que luego de transcurridos estos 5 años de su siembra, ese legado que dejó Chávez es un norte a retomar porque en la actualidad se ha ido desdibujando. “En la medida en que han pasado los años, en que se han agudizado los procesos de deterioro de nuestro país, la guerra económica; la operación psicológica; las propias debilidades del Gobierno en la conducción del proceso y en el enfrentamiento de esta guerra, el estar ahí justamente en ese proceso de enfrentamiento junto al pueblo que ha sido realmente debilitado, yo creo que la mira hoy es cómo retomar el rumbo que Chávez sembró”.
Mota indica que para mantener vivo el legado del Comandante Chávez se debe “recuperar la conexión real con el pueblo, desde una perspectiva protagónica, si había algo importante de Chávez con relación al nexo con el pueblo y ha ese proceso transformador con sus debilidades, sus dificultades y con sus errores, era que había una conexión muy profunda entre lo que se impulsaba como Gobierno revolucionario y el proceso de construcción de autonomía, del poder popular, de incorporar al pueblo organizado en las decisiones y en los aspectos de construcción y desarrollado del país desde la mirada de nosotros mismos, desde los de abajo, mirado desde los espacios organizativos del pueblo”.
La activista revolucionaria destaca la importancia de rescatar y retomar con fuerza todo lo heredado por Hugo Chávez, ya que a su juicio “ha habido un distanciamiento del proceso de Gobierno, de la fortaleza con la que se venían impulsando las acciones de organización y construcción del poder popular”.
Por ello, afirma que “se debe remirar muchas de las políticas que se están implementando que tienen un carácter muy unilateral y que no necesariamente están fortaleciendo esa línea que se venía trabajando en el fortalecimiento del poder popular y además de no echar atrás las conquistas sociales logradas en lo que se refiere a la ruptura de la desigualdad”.
Reconoce la adversa situación económica que atraviesa el país pero a su vez asevera que hay procesos sustantivos que han sufrido retrocesos, sobre todo lo relacionado con “la superación de desigualdades; la pobreza y procesos del ámbito social en todas las dimensiones de la vida, en donde no hemos logrado soluciones conjuntamente con la participación protagónica del pueblo. Para seguir de la mano en la construcción del socialismo debe retomarse lo que trazó Chávez sociopolíticamente”, resalta.
Para esta mujer revolucionaria, las mujeres tienen un rol protagónico en toda esta transformación, gracias a la inclusión y visibilización que le dio Chávez, pero también al despertar de la consciencia.
Recuerda que una de las cosas más importantes que ocurrió con Chávez en el poder fue la apertura, como se le dio voz a las mujeres luchadoras, feministas, “Chávez se reconoció como feminista, invitar a la estructura de poder que le rodeaba y asumir el socialismo como un proceso feminista y que eso a su vez se le suma el impulso de políticas públicas que iban desde promover espacios organizativos de la mujeres en todas las dimensiones, en lo territorial, en los aspectos propios de las mujeres, que implicaba fomentar esa institucionalidad que brindara servicios de atención, en todas esas dimensiones ha habido o parálisis o retrocesos en los últimos años y la verdad es que retomar ese legado implica retomarlo desde una perspectiva protagónica esa fuerza que se le dio a la visibilidad de la mujer más allá de la retórica, a la visibilidad e inclusión de la mujer en el proceso revolucionario; por un lado de transformación social del país, que va mucho más allá de solamente reconocer el hecho que la mujer somos mayoría sino a la concreción de aspectos normativos, en términos de política y cultural que transforman la violencia contra la mujer, que transforman la desigualdad desde aspectos como el ejercicio del poder, somos la mayoría pero en lo concreto no somos la mayoría en el poder, apenas somos 7% en las Alcaldías; 12% en las Gobernaciones, en todos últimos años es donde ha habido menos del 20% de las mujeres en todos los cargos del Ejecutivo que tiene que ver con el ejercicio de toma de decisiones, ser partícipe de la conducción del país desde una perspectiva de género que implica luchar y no solo que podamos estar en esos espacios, sino que las mujeres puedan encaminar cosas que cambien la realidad opresiva de las mujeres: la violencia que está culturalmente instauradas en nuestra sociedad que van desde lo político hasta lo familiar y doméstico; así como lo que tiene que ver con el goce pleno de derechos no reconocidos aún como los derechos sexuales y reproductivos; la autonomía de la mujer a decidir sobre su cuerpo; el derecho a tener acceso a educación sexual liberadora que permita afrontar problemáticas como el embarazo adolescente; el acceso a anticonceptivos; la maternidad no deseada; la maternidad forzada”.
Mota refiere que todos esos elementos tienen que ver con aspectos normativos no conquistados, “porque pasamos de ser un feminismo revolucionario, somos un socialismo feminista que apuesta a ello pero eso se traduce en aspectos concretos que impactan en la masa de mujeres del país, entonces retomar ese legado de Chávez implica justamente comenzar a avanzar, detener la parálisis que ha habido en el país, retomar nuestra dirección para que esas conquistas se recuperen, se consoliden y se expandan”.
En cuanto al papel de la mujer revolucionaria enfatiza que debe haber organización, visibilidad y corresponsabilidad, “hay que mantener activa la presencia de las mujeres en los espacios de participación social pública y política y por otro lado hay que aumentar los niveles de exigibilidad, yo creo que si efectivamente algunas y algunos consideramos que se ha perdido el foco entre la acción del Estado de la mano del poder popular en función de las conquistas, le corresponde al poder popular y a los movimientos sociales aumentar la exigibilidad hacia nuestro propio Gobierno para que dé respuesta y se tomen acciones que visibilicen las problemáticas, porque no es suficiente con la retórica del bienestar sino que es importante hacer ver donde estamos retrocediendo o donde aún no hemos tenido conquistas o donde haya aspectos todavía que deban adaptarse”.
La activista y luchadora social por los derechos de las mujeres y de las personas con discapacidad manifiesta que ante la desesperanza que reina en la actualidad en el pueblo se debe seguir apostando a las soluciones colectivas.
“Si algo no debe permitirnos a las y los revolucionaros en esta batalla tan profunda que ha habido contra nosotros, que se acentúa cada vez más y está produciendo importantes niveles de depresión y de desilusión social que no son tan visibilizados pero que están ahí presentes, porque hay problemáticas muy concretas que son consecuencia de esa operación psicológica, de esta guerra económica sumada a todo aspectos que tienen que ver con ver hasta qué punto el estado está dando la respuesta más oportunas en esta batalla que en el pueblo, en la gente en aspectos que son la cotidianidad de nuestra vida, como la dificultad para comer; para proveernos de productos higiénicos; la dificultad para movilizarnos con la crisis que hay en el transporte; lo relacionado con los nexos familiares frente a una migración que es real y cada vez es más contundente hacia fuera del país, que es un problema que atraviesa las clases sociales, que atraviesa las orientaciones política- ideológicas, no se puede seguir diciendo que se van los opositores exclusivamente. Frente a esas problemáticas que están afectando los aspectos tangibles y esenciales de la vida de las y los venezolanos, yo considero que seguir apostando a soluciones colectivas a soluciones organizativas comunes, a espacios de enfrentamiento de esas realidades no desde la individualidad, porque hay una intencionalidad de que este deterioro tan profundo nos recoja y nos esconda en el individualismo, nos lleve a lo profundo de ese pensamiento neoliberal que es el sálvese quien pueda, que cada quien resuelva por su lado, por eso creo que la única manera de enfrentar todo eso desde la perspectiva socialista es desde los valores comunes, buscando soluciones colectivas que nos permitan enfrentar de manera más solidaria todo lo que estamos viviendo”.
De manera de crítica constructiva, Mota Gutiérrez enfatiza que a fin de minimizar el impacto de la crisis que atraviesa el país y que afecta al pueblo venezolano “el Estado debe mirar con más transparencia la gravedad del deterioro que estamos viviendo en materia alimentaria, de salud y de movilización y trazar rutas de atención de estos problemas en el marco de esta guerra que no sean tan ajenos a la verdadera solución, como determinadas reparticiones que terminan acentuando los procesos de desigualdad; que si pueden ayudar a apaliar algunas problemáticas de un porcentaje de la población pero no atiende el problema de fondo, con soluciones más colectivas miradas conjuntamente con el pueblo”.
Mota apuesta por lo común, lo colectivo y hasta en lo espiritual debe reinar, “que quienes creemos en este proceso, que los comunes nos juntemos y quienes aún tenemos esperanza sigamos luchando y sigamos buscando la posibilidad de enfrentar la coyuntura y no dejemos de mirar hacia adelante, no dejemos de mirar el horizonte político más allá del presente y la única manera de no perder esa mirada es manteniendo un diálogo y una actuación política entre los comunes, con todas esas herramientas que nos dejó el Comandante Chávez”, resalta.
Define a Chávez como transformación y afirma que el mejor aprendizaje que como pueblo es ubicarnos como un todo, “pero también es cierto que en ese todo hay desigualdades en las posibilidades de la conducción socio- política de un país, si todos somos Chávez pero la elit que está al frente del ejercicio de Gobierno tiene mayor responsabilidad en la posibilidad de obtener resultados de la mano con el pueblo porque está teniendo control del aparato que permite el impulso de esas transformaciones, si Chávez somos todos pero hay mayor responsabilidad en unos que en otros”.
Expresa su gratitud al Comandante Chávez por tanto amor, “yo le diría a 5 años de su partida, Gracias, gracias, gracias, a título más personal y humano es uno de los agentes transformadores de mi vida más importantes, le agradezco a la vida profundamente por haber tenido la oportunidad de vivir este momento histórico de nuestro país, incluso en medio de la complejidad que estamos ahora, Chávez no solo fue el líder que necesitaba el proceso para el despertar del pueblo venezolano y que ahorita están tratando de adormecerle, Chávez tuvo un impacto muy profundo en Latinoamérica y el mundo, la fuerza de Chávez es algo que se agradece, por eso a quienes estuvieron más cerca de él yo les diría que remiraran ese legado, remirar sus estrategias políticas de fondo que fueron trazadas y que muchos nos identificamos con ellas y nos enrumbamos en este camino, tener la humildad de volver la mirada atrás y tratar de recuperar algunas de esas prácticas o mejorarlas de cara al presente que es tan complejo”.
Para Mota Hugo Chávez fue la transformación el despertar del pueblo venezolano, “transformación, igualdad, esas son las palabras más profundas que me llevan a Chávez, él era movimiento, fuerza en acción transformadora continua, Chávez era una avalancha hacia adelante, con esperanza, con alegría, con fuerza, era símbolo de transformación desde la esperanza2.
Poder popular organizado: un sueño colectivo de dignidad y esperanza
José Enrique Solórzano Morales, mejor conocido como Yoda, de la Casa de Movimientos Culturales La Minka en la parroquia Altagracia en Caracas, y miembro del movimiento Comunidades al Mando Nuestramérica, luchador social, chavista y revolucionario trabaja por la continuidad del legado de Hugo Chávez, lucha cada día junto a la comunidad organizada para concretar sueños colectivos, para desde la cultura y el poder popular hacer Revolución.
Para Yoda, el principal legado de Chávez fue la dignidad, “rescató la dignidad de un pueblo explotado, oprimido, fruto de una invasión colonial, de una arremetida voraz del capitalismo para convertirnos en colonia, Chávez nos sacó de esa miseria y nos levantó la mirada al frente y nos enseño a mirarnos con dignidad ante el mundo. Y esa dignidad además estuvo acompañado por el amor a la Patria para construir un modo de vida distinto al del capital, al de la explotación, a transgredir todas las relaciones desde el punto de vista- organizativo, dirigentes- dirigidos; profesores- estudiantes; trabajador- patrono; nos levantó la esperanza de sueños que se han contratado en el horizonte a través del reencuentro, repensándonos como individuo, como comunidad, como Patria”.
En cuanto a la organización popular y a las comunas, este revolucionario asegura que fue otro de los sueños concretados por el Comandante Chávez, “la comuna es el sueño al que aspiramos todos los que negamos las relaciones sociales del capital, hacia eso vamos, hacia un nuevo modelo de sociedad, un nuevo modelo de relaciones sociales, que contrarresten el modelo explotador, genocida que ha sido el capitalismo donde las riquezas permanecen en las manos de unos pocos y donde el desarrollo productivo, cultural, tecnológico de una Nación se van a los bolsillos individuales, en vez de al desarrollo social y productivo de la colectividad. El Comandante Chávez nos dejó una tarea enorme que fue construir comunas, pueblo organizado, auto organizado y en esa tarea estamos a diario, construyendo relaciones sociales basadas en la solidaridad, el respeto mutuo, en el control de nuestros territorios comunales”.
Este comunero asegura que el legado de Chávez sigue vivo y multiplicándose, “a 5 años de su partida, con todos los embates que ha vivido Venezuela, seguimos resistiendo en pie de lucha, la unidad del pueblo revolucionario a través del liderazgo del presidente Nicolás Maduro es una realidad, y seguimos aquí el pueblo subversivo, insurgente y revolucionario dando la batalla, creando comunas y espacios para hacer política desde abajo, haciendo Revolución. A 5 años de su siembra sigue creciendo esa plántula que él nos dejó que va a dar sus frutos y sus semillas para la construcción de una Patria nueva”.
Destaca que el legado de Chávez no debe quedar en la retórica y que se debe avanzar en la concreción de la organización popular con miras a consolidar los ámbitos productivos, culturales, políticos, comunicacionales para profundizar el socialismo como modelo de proyecto país incluyente y de justicia social.
“En este avance haremos irreversible la Revolución, haremos que la Revolución no sea un problema de gobierno, sino un proceso concreto, una realidad construida por el pueblo. Nos toca a nosotros, al poder popular, al pueblo organizado seguir avanzando para ser irreversible e indestructible nuestro proceso revolucionario que no solo es un compromiso con el Comandante Chávez, sino un compromiso histórico con nuestra Patria y con nuestro pueblo, desde Bolívar, nuestros indígenas, el cimarronismo, desde las rebeliones populares de Ezequiel Zamora, el Taita Boves, desde ahí venimos arrastrando una lucha histórica por la dignidad, por reconocer nuestra autonomía y determinación y con Chávez esa lucha la convertimos en poder para el pueblo”, apunta.
Con relación a los logros y avances del poder popular organizado afirma que son muchas las conquistas, “El poder popular organizado es el que sostiene aguas abajo este proceso, nosotros creemos que si esto sigue en pie no es producto de políticas de Estado, no es producto de las acciones gubernamentales, ni mucho menos producto de políticas de partidos, esto es producto de este pueblo noble que sigue trabajando, que sintió el llamado de Chávez y de manera propia ha venido autogobernándose, autoorganizándose, y ha generado soluciones concretas que nuestro país necesita, produciendo a la necesidad de su comunidad; comunicándose a la necesidad de su comunidad, llámense organizaciones políticas, Consejos Comunales, comunas, Empresas de Propiedad Social, Clap, Movimientos sociales y populares y son expresiones del poder popular organizado que tiene un fin que es hacer frente al imperio, consolidar la Revolución desde la lógica no de quién gobierna sino desde la lógica del pueblo con el poder y el pueblo gobernando con sus capacidades”.
“Amor” es el sentimiento sublime que a José Enrique Solórzano le inspira Hugo Chávez, su amor por la Patria, por su pueblo, por su justicia para los históricamente excluidos, con orgullo asegura que las y los comuneros junto al pueblo organizado pueden decir a 5 años de la siembra del Líder de la Revolución Bolivariana: “Comandante Chávez te estamos cumpliendo”.
Chávez nos dejó todo
“Apostando a la transformación de la mujer y el hombre nuevo, con el Plan de la Patria y su legado Chávez nos dejó todo: la libertad, la Patria, el amor, su vida y la esperanza para un pueblo”, así lo expone Iriam Machado, enfermera en el Centro de Diagnóstico Integral, CDI, ubicado en Lídice, en la parroquia capitalina de La Pastora.
Para esta mujer luchadora y revolucionaria, “el Comandante Supremo fue la luz de un pueblo ávido de un cambio que llegó con un por ahora y se quedó para siempre”.
Refiere que “ese legado trasciende la educación gratuita y de calidad con las Misiones sociales Robinson, Rivas y Sucre, con las aldeas universitarias; la salud con Barrio Adentro; la alimentación; Chávez nos dejó la libertad, la soberanía y sembró en nosotros el amor por la Patria, nuestra identidad como nación socialista y revolucionaria; nos dio su vida para que nosotros siguiéramos su enseñanza, su legado y nuestros hijos y nietos conocieran su obra de amor para las y los venezolanos”.
Para Machado Chávez es sinónimo de esperanza, “porque aún en los tiempos difíciles, la solución no es irse del país, es construir en colectivo, es asumir nuestra responsabilidad como hijos de Bolívar y Chávez, es luchar día tras día, trabajar, perseverar y no decaer ante las adversidades”.
Agradece al líder de la Revolución Bolivariana por todo su amor, porque le abrió los ojos a una nueva forma de mirar la vida, el mundo y conocer una alternativa distinta para vivir en comunidad, para ayudar a otros, para avanzar juntos en la construcción de un nuevo modelo de país distinto al capitalismo.
“Hoy a 5 años de su siembra, le diría a Chávez con todo mi corazón que lo amo, que nos hace muchísima falta, pero que aquí estamos rodilla en tierra sus hijos para continuar con su lucha, con su legado para conquistar la victoria junto a nuestro presidente Nicolás Maduro, porque la Revolución Bolivariana está aquí para rato, no hemos decaído con toda esta guerra económica que nos tienen, seguimos luchando y seguiremos venciendo porque así lo quiso él, nuestro líder, nuestro presidente, nuestro Gigante”, expresa con sentimiento está enfermera de 55 años de edad que día tras día atiende con amor a los pacientes que llegan al CDI de Lídice.
Y se hizo millones
Chávez se convirtió en pueblo, y que cada uno de nosotros debe ser Chávez. Su gran legado, fue darnos las herramientas para que cada una de nuestras manos pudiera convertirse en protagonista de la construcción de una Patria de inclusión y justicia social.
Ese Chávez que moribundo se lanzó a la calle a ganar su última elección, fue el líder que antepuso a su pueblo a su propio ser. Ese es nuestro legado: por eso las voces de los movimientos sociales, de las mujeres luchadoras, de los hombres resteados, por el desarrollo de una nueva conciencia social es el mayor homenaje que le podemos rendir a un lustro de su siembra.
Al morir se convirtió en millones, millones que estamos obligados a luchar por cambiar los procesos burgueses y la mentalidad egoísta, por un sentimiento de amor, solidaridad, justicia y equidad, de ese aprendizaje que nos dejó Chávez, quien enseñó con la práctica la igualdad tomándose el cafecito con el hombre de la calle, en una de las columnas del Silencio, que inculcó el sentir patrio, independiente y soberano con su banda presidencial al firmar el paquete legal que el pueblo revolucionario debe convertir en su genética sanguínea para darle a sus hijos y nietos una Patria, con mayúscula, impregnada por el amor y la entrega de ese Gigante, para asegurar que su sacrificio ha valido la pena.
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