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Por Miguel Vaquerano | Verdad Digital
Tras
votar esta mañana junto a su esposa, la primera dama Margarita Villalta
de Sánchez, en el Teatro de Cámara Roque Dalton, el presidente Salvador
Sánchez Cerén descartó que en el país pueda existir algún fraude, por
lo que restó importancia a las voces disonantes que promueven esta
hipótesis.
“Como decía el presidente del Tribunal Supremo Electoral, en El
Salvador debería ser prohibida la palabra fraude, porque no puede
existir ningún mecanismo de fraude, cuando son los partidos políticos
los que organizan y toman las decisiones”, manifestó.
Calificó al proceso electoral llevado a cabo este domingo como
transparente, con normalidad y democrático, y precisó que los
salvadoreños están viviendo una fiesta cívica donde puedan elegir el
rumbo del país.
“El país dejó los fraudes hace 23 años. Hace 23 años sí era famosa la
figura de la regalía de los tamales por votos, o la compra de votos,
pero ahora la ciudadanía ha ido adquiriendo claridad de sus derechos y
en la medida que la población tiene claridad de sus derechos no se deja
comprar su voluntad”, agregó.
El mandatario enfatizó que “no hay espacios para fraudes en esta
democracia que está construyendo El Salvador”, al tiempo que instó a
respetar los resultados de este proceso electoral ."Hay que respetar la
decisión del ciudadano”, añadió.
Afirmó que son miles y miles de salvadoreños los que están
participando en el desarrollo de las elecciones, pero señaló que es
importante que todo el proceso se está desarrollando con normalidad y
tranquilidad.
“Si hay alguna demanda que no se trate de cuestionar la voluntad del
soberanos, la voluntad del soberano es la que se está emitiendo cada una
de las personas, que esta depositando su voto, ese voto tiene que ser
respetado”, puntualizó.
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