Dilma: "Tengo la obligación de escuchar la voz de las calles"

Por ALBA TV

En la noche de este viernes 21 de junio, la presidente de Brasil, Dilma Roussef, habló al país en cadena de radio y televisión, asegurando que su gobierno toma nota de las demandas populares.

En su pronunciamiento, que duró poco más de diez minutos, la presidente afirmó que direccionará su política hacia tres objetivos: la puesta en marcha de un plan nacional de transporte público, el fortalecimiento de la salud pública incorporando miles de médicos extranjeros y el destino del 100% de la regalías petroleras para la educación, proyecto que ya ha sido presentado al Congreso.

También informó que se reunirá con quienes lideran pacíficamente las manifestaciones. "Necesitamos de sus contribuciones, pensamientos y experiencias para avanzar hacia el futuro", expresó. "Necesitamos oxigenar nuestra política, que traiga instituciones más transparentes. Es la ciudadanía la que debe ser escuchada y no el poder económico". Además, anunció que se reunirá con gobernadores estadales y alcaldes de las principales ciudades para hacer "un gran pacto" que permita mejorar los servicios públicos.

La presidente aseguró que la sociedad debe "aprovechar el vigor de las manifestaciones para producir más cambios que beneficien al conjunto de la población brasileña", destacando que "las manifestaciones de esta semana trajeron importantes lecciones: las tarifas bajaron y las demandas de los manifestantes alcanzaron prioridad nacional".

También sostuvo que respetará la movilización, aunque será dura con lo que calificó como "una minoría violenta". Al mismo tiempo, reivindicó la participación política, saliendo al paso a las demandas anti-partidistas que tuvieron lugar en los últimos días. “Brasil está luchando mucho para transformarse en un país más justo. No fue fácil llegar donde llegamos, como no es fácil llegar donde desean quienes están en las calles. Sólo haremos esto realidad si fortalecemos la democracia. Los manifestantes tienen derecho y libertad de cuestionar y criticar todo, de proponer y exigir cambios, de defender con pasión sus ideas y propuestas, pero precisan hacerlo de forma pacífica y ordenada", señaló.

Por último, defendió la realización del Mundial de fútbol 2014. Dilma sostuvo que el dinero para la organización de la Copa no sale del presupuesto nacional sino de la inversión privada. "¡Brasil se merece y va a hacer una gran Copa!", expresó enfáticamente. De todas maneras, no realizó ninguna mención a los desplazamientos que tanto las obras públicas como la especulación privada está provocando, con importantes consecuencias sociales.

"Mis amigos y amigas, quiero repetir que mi gobierno está escuchando las voces democráticas que piden cambios. Quiero decir a ustedes que fueron pacíficamente a las calles que los estoy escuchando. No habrá tregua con la corrupción. Con la democracia vamos a continuar construyendo juntos nuestro gran país", concluyó.

También por la noche del viernes, se supo que la policía de Ribeirão Preto, en el estado de São Paulo, continúa la búsqueda del empresario Alexsandro Ishisato de Azevedo, de 37 años, acusado de atropellar con un vehículo un bloqueo de carreteras, causando la muerte del joven de 18 años Marco Delefrate y heridas a otras tres personas, tras lo cual se dio a la fuga.

El Movimiento Passe Livre, por su parte, anunció que no tienen previsto convocar nuevas manifestaciones. "El objetivo inicial de las manifestaciones -revocar el aumento del transpote público- fue cumplido", explicó Lucas Monteiro, uno de sus voceros. Monteiro dijo que "el MPL va a continuar haciendo actividades, discusiones, debates sobre el transporte como un derecho, sobre la tarifa cero, pero en este momento no vamos a convocar a manifestaciones".

En un comunicado, el MPL también lamentó los hechos de violencia contra grupos de izquierda como los ocurridos en Sao Pablo durante la jornada del jueves, cuando activista de derecha quemaron banderas partidarias. "El MPL es un movimiento social apartidario, pero no antipartidario", expresaron, reivindicando que los grupos de izquierda participaron desde el inicio. "Sería muy oportunista querer expulsarlos de esta lucha", expresó Monteiro.

Fuente: ALBA TV