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Por Dina Meza - Defensores en Línea
Unas 11 familias de víctimas mortales del golpe militar de Estado, llegaron al Ministerio Público vistiendo camisetas, fotos de sus parientes, mantas y gritando consignas para exigir justicia, este 26 de julio.
Desde el 28 de junio de 2009 en que se llevó a cabo el rompimiento de la institucionalidad, más de 200 personas han sido asesinadas, sus muertes tienen claras motivaciones políticas.
Sin embargo hasta la fecha el Ministerio Público no ha llevado a la cárcel a ninguno de los responsables de los crímenes y en algunos casos ni siquiera existe la denuncia porque ha sido extraviada en esa institución.
Las familias que se hicieron presentes fueron las de los y las mártires, Isis Obed Murillo; Ilse Ivania Velásquez; Roger Vallejo; Félix Murillo; Mario Fidel Contreras; Manuel Flores; Karten Jessenia Hernández; Walter Tróchez; Julio Fúnez; Pedro Magdiel Muñoz, Pablo Villanueva.
“Qué demandamos, justicia, justicia, justicia. Para los asesinos… cárcel”, era parte de las consignas que gritaron en las afueras de la Fiscalía.
En un comunicado entregado a periodistas de distintos medios de comunicación los familiares expresaron que “Hoy los familiares de 11 víctimas asesinadas después del golpe de Estado militar comparecemos aquí ante el Ministerio Público y pasado mañana ante las Naciones Unidas exigiendo justicia”.
Advirtieron que las familiares estarán una a una de todos los confines de Honduras, con el dedo índice señalando a fiscales, investigadores, policías, magistrados y jueces.
Informaron que “En esta reclamación nos acompaña el Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos de Honduras (COFADEH), que comparte su experiencia de lucha a través de tres décadas contra las ejecuciones arbitrarias y sumarias, torturas, tratos crueles inhumanos y degradantes, secuestros, detenciones ilegales masivas y represión a manifestaciones pacíficas”.
Mientras unos familiares quedaron afuera, otros fueron ante la Fiscalía General y un tercer grupo a la Fiscalía de Derechos Humanos, para presentar peticiones de información en relación al avance de los casos.
Solicitaron que aparte de brindarles un informe sobre los avances de los casos se proceda a tomar declaraciones a los familiares que tienen conocimiento cercano de las motivaciones posibles de los asesinatos.
Adelina López, madre de Félix Murillo, presentó otra vez la denuncia por el crimen de su hijo porque ésta fue “perdida”, por esa dependencia. Ninguna familia tuvo una información concreta sino que sus peticiones fueron anexadas a los expedientes.
Desde hace varios meses el COFADEH ha solicitado información de distintos casos sin obtener respuesta hasta el momento, es más tuvo que hacer acciones urgentes para que el Ministerio Público no cerrara el expediente de la profesora Ilse Ivania Velásquez, el cual no tiene avances investigativos sino que se presenta como una muerte por accidente de tránsito. La presión internacional evitó el cierre.
Este jueves 28 de julio decenas de personas participarán en una movilización víctimas del golpe de Estado que iniciará en la Universidad Pedagógica Francisco Morazán hasta las Naciones Unidas. Las familias antes mencionadas en conjunto con el COFADEH se harán presentes a esta actividad que conlleva el propósito también de exigir justicia.
Este es el texto del comunicado de este 26 de julio ante el Ministerio Público:
11 casos, 11 gritos, 11 peticiones… Vendrán otras
Hoy los familiares de 11 víctimas asesinadas después del golpe de estado militar comparecemos aquí ente el Ministerio Público y pasado mañana ante las Naciones Unidas ¡exigiendo justicia!
Una a una, todas las familias, estaremos desde todos los confines del país con el dedo índice sobre fiscales, investigadores, policías, magistrados y jueces.
Somos la nueva generación de víctimas, que emerge del dolor del golpe de estado, cuya continuación se niega a la justicia mientras se hunde la impunidad.
Isy Obed Murillo, Ilse Ivannia Velásquez, Roger Vallejo, Félix Murillo, Mario Fidel Contreras, Manuel Flores, Karen Yessenia Hernández, Walter Tróchez, Julio Fúnez, Pedro Magdiel Múnoz, Pablo Villanueva. Están aquí.
Otros vendrán
En esta reclamación nos acompaña el Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos de Honduras (COFADEH), que comparte su experiencia de lucha a través de tres décadas contra las ejecuciones arbitrarias y sumarias, torturas, tratos crueles inhumanos y degradantes, secuestros, detenciones ilegales masivas y represión a manifestaciones pacíficas.
La mayoría de los hechos cumplen casi dos años de haber sido cometidos, pero ninguna investigación ha sido organizada con seriedad por el Ministerio Público.
El principio de debida diligencia en casos de violaciones graves de derechos humanos es solamente una insistente declaración impresionista de consumo mediático, pues no hemos sido incluidos ni respetados en nuestro derechos a saber.
El derecho universal de las familias de víctimas de violaciones a los derechos humanos a conocer la verdad ha sido sistemáticamente violado.
Hoy acusamos al Ministerio Público no solamente por ocultar sus diligencias, sino por obstaculizar el trabajo de las defensoras y defensores de derechos humanos.
No queremos volver a vivir la situación de los años ochentas hasta mediados de los noventa cuando el Estados de Honduras aplicó una política de represión, ocultó las evidencias y protegió a los criminales.
En consecuencia, solicitamos a la comunidad nacional e internacional que exija a las instituciones sobrevivientes del golpe de Estado que investiguen de forma imparcial e inmediata las circunstancias que provocaron la muerte de nuestros familiares.
Estamos aquí para advertir que siempre estaremos, que volveremos y que no nos iremos.
De los hechos y de los hechores,
Ni olvido ni perdón
Tegucigalpa, 26 de julio de 2011
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