Por Giorgio Trucchi
El diferendo fronterizo entre Nicaragua y Costa Rica a raíz del dragado del río San Juan y de una supuesta presencia de militares nicaragüenses en territorio costarricense, sigue generando fuertes tensiones entre los dos países, y próximamente podría llegar hasta la Corte Internacional de Justicia de La Haya (CIJ).
El ex comandante guerrillero sandinista Edén Pastora fue encargado por el actual gobierno nicaragüense de las obras de limpieza del río San Juan. En ocasión del Foro "Proyecto Nacional: Dragado del Río San Juan", organizado por la Facultad de Ciencias Jurídicas de la Universidad Centroaméricana (UCA), Pastora accedió a conversar con la Lista Informativa “Nicaragua y más”.
- En el pasado se había hablado mucho del dragado del río San Juan. Y ahora que comienza a ser una realidad, Costa Rica reacciona de esa manera. ¿Se esperaba una reacción tan fuerte?
- De verdad que no. Sabíamos que podía haber algún tipo de reacción, pero nunca al extremo de acusarnos de invasión, de recurrir a instancias internacionales, ni que volviera otra vez a la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
No nos esperábamos esta reacción violenta porque el Tratado Cañas-Jeréz, los laudos Cleveland y Alexander, la misma resolución de la CIJ de 2009 son claros, al decir que Nicaragua tiene el derecho de limpiar nuestro río San Juan, y es justamente lo que estamos haciendo.
- Sin embargo, Costa Rica sigue con su posición y hasta está recurriendo a la Corte Internacional de Justicia acusando a Nicaragua de delitos ambientales...
- Costa Rica se vende muy bien ante el mundo. Maneja magistralmente los medios de comunicación y quiere aparentar ser la gran defensora del medioambiente. Sin embargo, la verdad es que ha depredado la margen derecha del río San Juan, con su industria agropecuaria ha permitido la sedimentación, ha causado la erosión y la contaminación.
Todas estas cosas las vamos a recoger en el Libro Blanco que ha anunciado el presidente Ortega y que va a realizar el Departamento de Historia del Ejército de Nicaragua. Vamos a demostrar que Costa Rica ha provocado graves daños ambientales al río San Juan. Vamos a presentar las pruebas para contrarrestar las mentiras de Costa Rica.
- ¿Cuáles cree que son los objetivos de Costa Rica en este conflicto?
- Hay varios intereses. Por una lado hay intereses políticos de ocultar los escandalos que se están dando en ese país. Están tratando de desviar la atención a través de ese conflicto con Nicaragua. Por otro lado hay intereses económicos poderosos.
Han invertido mucho dinero en esta zona, aprovechando de nuestras aguas que son desviadas hacia el Río Colorado. Al limpiar nuestro río y recuperar nuestro caudal ( y paso) histórico, ellos van a ser afectados económicamente. Le temen también a que frenemos su expansionismo y eso se mira claramente al no querer amojonar la frontera.
- Se ha hablado de intereses de otros países, como por ejemplo Colombia y Honduras...
- La actitud de Costa Rica de plegarse a Colombia y estar a la par de Honduras, nos da la sensación de que estamos rodeados de enemigos. Estos tres países, con su política expansionista, quieren reducir nuestro mar territorial al tamaño de una bañera. Además, hay intereses mayores contra el proyecto del Alba (en la región).
- También se ha hablado de supuestos intereses del crimen organizado y el narcotráfico en fomentar ese conflicto...
- Hay algo extraño. Como también es extraño que Costa Rica esté protegiendo a Agustín Reyes Aragón, el jefe de la banda y de la estructura que daba apoyo al narcotráfico aquí en la frontera entre Nicaragua y Costa Rica. En este sentido, es estrictamente necesario que nuestras tropas permanezcan en la zona para (combatir) el crímen organizado, el tráfico de armas. Desgraciadamente, las autoridades y la Policía de Costa Rica no quieren coordinar acciones con Nicaragua, más bien resienten esta actitud de nuestras autoridades.
- En Costa Rica han emitido una orden de captura en su contra por supuestos delitos ambientales. ¿Tiene temor por lo que le pueda pasar?
- Yo no soy costarricense y no he hecho nada en Costa Rica. Esta orden no tiene ningún asidero legal y no hay posibilidad física de poder detenerme. Tendrían que invadir Nicaragua y matarme para poder capturarme.
- El diferendo entre los dos países ha cohesionado los diferentes sectores de la sociedad y política nicaragüense. Sin embargo, en estas últimas semanas sectores de la oposición han comenzado a criticar al gobierno, y el diputado Eduardo Montealegre hasta ha puesto en duda su capacidad para llevar adelante el dragado del río. ¿Qué opina al respecto?
- Es una minoría. Siempre hay sirvientes nacionales, vendepatrias y politiqueros que quieren aprovechar las problemáticas internacionales para hacer política nacional. Montealegre criticó a medio mundo, no sólo a mí. Son actitudes de gente que no tiene un espíritu nacionalista y que su único interés es el dinero.
- ¿Va a continuar con el dragado?
- No hay fuerza en el mundo que pueda detener esta limpieza del río. Es un derecho nuestro, reconocido por el mundo, por la Corte de La Haya, por los tratados y laudos. Vamos a traer más dragas y trabajadores. Es una decisión del Presidente (Ortega) y nadie nos va a parar.
- ¿Ni siquiera Costa Rica?
- Nadie, aunque hay que diferenciar entre el pueblo noble de Costa Rica y los xenofóbicos, un sector muy reducido que controla los medios de comunicación, y los políticos que tienen un espíritu expansionista. Para nosotros es un problema histórico. Nosotros nunca hemos invadido Costa Rica, nunca le hemos quitado una pulgada de tierra, (más bien) es Costa Rica que nos ha despojado de grandes extensiones de tierra, como Guanacaste y Nicoya, la margen derecha del río San Juan. Son ellos que no desisten, siguen insistiendo y no nos dejan en paz.
- En este conflicto se ha demostrado, una vez más, la debilidad de la OEA...
- La OEA no funcionó en las Malvinas, ni en el golpe en Honduras y no funciona en este caso. Hubo una votación y una resolución incorrecta, y es por eso que vamos a recurrir a la Corte de Justicia de La Haya. Necesitamos de otro organismo que de verdad represente los intereses de nosotros los latinoamericanos y caribeños, sin Estados Unidos ni Canadá.
- Finalmente, usted ha pasado por muchas etapas. Comandante guerrillero sandinista contra Somoza, se levantó en armas contra el FSLN en los 80 y ahora volvió a apoyar al gobierno de Daniel Ortega. ¿Qué le hizo cambiar de idea?
- Yo sigo siendo el mismo sandinista y nacionalista. Combatí la dictadura de Somoza y después los errores de la Dirección Nacional (del FSLN). No combatí al sandinismo, ni a Daniel (Ortega), sino a los errores de un mando colegiado. Ahora, Daniel (Ortega) está haciendo lo que yo creí que se debía haber hecho en los años 80 y sería inconsistente y errático si no lo apoyara.
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