TeleSUR
La Cumbre de la Unidad de América Latina y el Caribe que se lleva a Cabo en Cancún, al sureste de México, terminó este martes su segunda sesión plenaria con la aprobación de un organismo regional que reúne a los países de América Latina y el Caribe sin la participación de Estados Unidos ni Canadá, nuevos planes para apoyar a la reconstrucción de Haití y la colaboración entre las naciones para reforzar la seguridad en la región.
En palabras del presidente anfitrión, Felipe Calderón, se dio lectura a la declaración final que contempla 87 puntos que pasan por los temas de la crisis financiera internacional, comercio, energía, integración física en infraestructura, ciencia y tecnología, desarrollo social, migración, desarrollo sostenible, desastres naturales, derechos humanos, asuntos de seguridad y cooperación Sur-Sur.
El nuevo organismo regional fue aprobado en el documento, pero que se daría un tiempo para redactar los estatutos y reglamentos, por lo que se estima que comenzaría su labor en la próxima cumbre del Grupo de Río, que se llevará a cabo en Caracas, Venezuela, en 2011.
Mientras tanto, los países se comprometieron a seguir impulsando la integración y el desarrollo de estas naciones a través de foros.
El nuevo organismo reunirá al Grupo de Río y la Comunidad del Caribe (CARICOM) y funcione en paralelo a la Organización de Estados Americanos (OEA), criticada en su rol de guardián de la democracia regional luego de sus infructuosos esfuerzos por revertir un golpe de Estado en Honduras.
Desde este lunes, los presidentes y representantes de 32 naciones de Latinoamérica hicieron acto de presencia en la ciudad turística de Cancún, con el fin de reforzar la unión de la región y debatir los temas más importantes que la afectan.
En la primera reunión entre México y el Caricom (Comunidad del Caribe) se destacó la participación del presidente de Haití, René Préval, quien solicitó una gran alianza internacional que ayude a las millones de personas que quedaron afectadas consecuencia del potente terremoto que devastó a la nación caribeña el pasado 12 de enero.
Por otro lado, la presidenta argentina, Cristina Fernández, logró el respaldo de las naciones de la región a su país, que mantiene una histórica disputa con Gran Bretaña por la soberanía del archipiélago.
El Gobierno argentino reaccionó en las últimas semanas tras conocer las intenciones de la empresa Desire Petroleum de comenzar a realizar exploraciones de petróleo en las islas.
En la cumbre se firmó una declaración conjunta para rechazar las actividades británicas petroleras en las Malvinas.
La Cumbre de la Unidad de América Latina y el Caribe que se lleva a Cabo en Cancún, al sureste de México, terminó este martes su segunda sesión plenaria con la aprobación de un organismo regional que reúne a los países de América Latina y el Caribe sin la participación de Estados Unidos ni Canadá, nuevos planes para apoyar a la reconstrucción de Haití y la colaboración entre las naciones para reforzar la seguridad en la región.
En palabras del presidente anfitrión, Felipe Calderón, se dio lectura a la declaración final que contempla 87 puntos que pasan por los temas de la crisis financiera internacional, comercio, energía, integración física en infraestructura, ciencia y tecnología, desarrollo social, migración, desarrollo sostenible, desastres naturales, derechos humanos, asuntos de seguridad y cooperación Sur-Sur.
El nuevo organismo regional fue aprobado en el documento, pero que se daría un tiempo para redactar los estatutos y reglamentos, por lo que se estima que comenzaría su labor en la próxima cumbre del Grupo de Río, que se llevará a cabo en Caracas, Venezuela, en 2011.
Mientras tanto, los países se comprometieron a seguir impulsando la integración y el desarrollo de estas naciones a través de foros.
El nuevo organismo reunirá al Grupo de Río y la Comunidad del Caribe (CARICOM) y funcione en paralelo a la Organización de Estados Americanos (OEA), criticada en su rol de guardián de la democracia regional luego de sus infructuosos esfuerzos por revertir un golpe de Estado en Honduras.
Desde este lunes, los presidentes y representantes de 32 naciones de Latinoamérica hicieron acto de presencia en la ciudad turística de Cancún, con el fin de reforzar la unión de la región y debatir los temas más importantes que la afectan.
En la primera reunión entre México y el Caricom (Comunidad del Caribe) se destacó la participación del presidente de Haití, René Préval, quien solicitó una gran alianza internacional que ayude a las millones de personas que quedaron afectadas consecuencia del potente terremoto que devastó a la nación caribeña el pasado 12 de enero.
Por otro lado, la presidenta argentina, Cristina Fernández, logró el respaldo de las naciones de la región a su país, que mantiene una histórica disputa con Gran Bretaña por la soberanía del archipiélago.
El Gobierno argentino reaccionó en las últimas semanas tras conocer las intenciones de la empresa Desire Petroleum de comenzar a realizar exploraciones de petróleo en las islas.
En la cumbre se firmó una declaración conjunta para rechazar las actividades británicas petroleras en las Malvinas.
El presidente de Cuba, Raúl Castro, aseguró este martes que la decisión de crear el nuevo organismo de Estados Latinoamericanos y el Caribe trascenderá en la historia del continente, por lo que consideró que estaban dadas las condiciones para darle un impulso y tenga una pronta aprobación.
"La decisión de crear la comisión de Estados Latinoamericanos y el Caribe es de trascendencia histórica, por lo que considero que están dadas las condiciones para la constitución de una organismo puramente latinoamericano que represente a las 33 naciones de América Latina y el Caribe", expresó el mandatario.
El líder cubano consideró que "no hay razón para que América Latina y el Caribe no cuente con su propia entidad de concertación política, económica y de cooperación e integración" por lo que afirmó que en la próxima cumbre que se realizará en Caracas en 2011 "sería el momento preciso para poner en marcha el nuevo organismo".
"Seamos consecuentes con la voluntad expresada en la Cumbre de Salvador de Bahía" que se llevó a cabo en diciembre de 2008 en el marco de la Cumbre de América Latina y el Caribe.
Sostuvo que su país "considera que la declaración es positiva, contiene lo elementos necesarios para abrir un período de trabajo (...) por lo que nuestra aspiración es que el documento se elabore con eficiencia y agilidad para poder firmarlo durante la próxima reunión".
El mandatario cubano expresó su apoyo, a la par de la mayoría de las naciones presentes en la Cumbre, con respecto a la demanda argentina de reclamo de la soberanía de las islas Malvinas y estimó que la acción de Gran Bretaña viola los derechos internacionales.
"Cuba, junto al resto de la América Latina y el Caribe, ha reivindicado el reclamo de Argentina en torno a las Islas Malvinas, respaldamos el derecho de esa nación de reclamar los recursos naturales y a demandar la exploración foránea de los hidrocarburos", indicó.
"La decisión de crear la comisión de Estados Latinoamericanos y el Caribe es de trascendencia histórica, por lo que considero que están dadas las condiciones para la constitución de una organismo puramente latinoamericano que represente a las 33 naciones de América Latina y el Caribe", expresó el mandatario.
El líder cubano consideró que "no hay razón para que América Latina y el Caribe no cuente con su propia entidad de concertación política, económica y de cooperación e integración" por lo que afirmó que en la próxima cumbre que se realizará en Caracas en 2011 "sería el momento preciso para poner en marcha el nuevo organismo".
"Seamos consecuentes con la voluntad expresada en la Cumbre de Salvador de Bahía" que se llevó a cabo en diciembre de 2008 en el marco de la Cumbre de América Latina y el Caribe.
Sostuvo que su país "considera que la declaración es positiva, contiene lo elementos necesarios para abrir un período de trabajo (...) por lo que nuestra aspiración es que el documento se elabore con eficiencia y agilidad para poder firmarlo durante la próxima reunión".
El mandatario cubano expresó su apoyo, a la par de la mayoría de las naciones presentes en la Cumbre, con respecto a la demanda argentina de reclamo de la soberanía de las islas Malvinas y estimó que la acción de Gran Bretaña viola los derechos internacionales.
"Cuba, junto al resto de la América Latina y el Caribe, ha reivindicado el reclamo de Argentina en torno a las Islas Malvinas, respaldamos el derecho de esa nación de reclamar los recursos naturales y a demandar la exploración foránea de los hidrocarburos", indicó.
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