El secuestro de Juan Chinchilla (8 de enero 2011) no es el único perpetrado en el Valle del Aguán.
El 6 de enero secuestraron al campesino Jorge Laínez de la comunidad El Despertar. Los policías y los guardias de seguridad de los empresarios René Morales y Reinaldo Canales lo metieron en las palmeras y fue liberado gracias a la denuncia inmediata ante los medios nacionales e internacionales. Terminó golpeado, torturado y encerrado en las celdas de la cárcel de la Policía nacional preventiva de Trujillo.
El mismo 6 de enero atentaron contra la vida de varios campesinos del asentamiento La Concepción, disparando varias ráfagas de AK 47.
Mientras este clima de represión ocurre, en el marco de la Operación Tumbador, Porfirio Lobo y César Ham (director del INA) llaman a los campesinos del MUCA (Movimiento Unificado Campesino del Aguán) para firmar un nuevo convenio.
Cuando secuestraron a Juan Chinchilla, los terratenientes enviaron un mensaje claro: están dispuestos a seguir peleando la tierra, aunque para ello tengan que terminar con muchas vidas, sin importarles el costo político para el gobierno y su impacto a nivel internacional.
Después del asesinato de los cinco campesinos (del Movimiento Campesino del Aguán - MCA) en la Guadalupe Karney, de dos campesinos de La Aurora y Los Marañones el 9 de enero, el atentado contra el campesino Franklin Diaz Padilla de la empresa campesina El Despertar, el 17 de enero guardias del empresario Miguel Facussé intentaron secuestrar al ciudadano Sergio Pineda, un amigo de los campesinos del asentamiento La Confianza.
Lo persiguieron durante unos diez minutos y al llegar a La Confianza, le hicieron varios disparos y lo bajaron del vehículo. También persiguieron al miembro del MUCA, Celeo Rodríguez, quien había salido de su casa al escuchar los disparos.
Durante el 18 y 19 de enero, un personaje con carácteristicas de sicario se estacionó frente a la casa del coordinador del FNRP en Colón, Wilfredo Paz, mientras transmitía su programa de noticias en Radio Globo.
El 22 de enero, en horas de la tarde, el profesor René Turcios, acompañado por el dirigente del MUCA, Rudy Hernández, fueron perseguidos por una motocicleta mientras se dirigían hacia Tocoa. A esa misma hora, dos vehículos ingresaban a las tierras que ocupa el movimiento campesino de Elixir, en el municipio de Sabá, e iniciaron persecución contra el jóven campesino Jorge Santos. Pese a los muchos disparos de armas de grueso calibre, el jóven logró escapar, mientras cuatro vehículos más sitiaban tel asentamiento.
Los días 21 y 22 de enero, una delegación internacional que se desplazaba por el Bajo Aguán, encabezada por el ciudadano noruego Hans Petter Buvollen, fue perseguida por un vehículo perteneciente a los empresarios terratenientes hasta que logro llegar a los asentamientos campesinos.
En medio de esta terrible represión, la lucha tiene ta,bién sus triunfos. El 21 de enero desmilitarizaron las instalaciones del INA en Colón y se anunció que ya ffue establecido el precio de las 3 mil hectáreas entregadas al MUCA el año pasado.
Sin embargo, en el Bajo Aguán la nueva estrategia es vender la idea que se está cumpliendo los compromisos con los campesinos, pero sigue la implementación de un plan de secuestro y asesinato a dirigentes campesinos y dirigentes del FNRP. En esta operación encubierta participan sicarios, policías activos, paramilitares y miembros del Ejército, con asesoría norteamericana.
Pero la lucha sigue. El 25 de enero, las mujeres del Aguán se tomarán la entrada al departamento de Colón para exigir castigo para los asesinos de los campesinos, una asamblea nacional constituyente, el retorno de Manuel Zelaya Rosales y en contra de la militarizacion en el Aguán.
A principios de febrero, continuarán la lucha los jóvenes con similares acciones,t bajo la organización del FNRP de la región.
Además, reiteramos la urgencia de instalar un observatorio permanente de derechos humanos.
El 6 de enero secuestraron al campesino Jorge Laínez de la comunidad El Despertar. Los policías y los guardias de seguridad de los empresarios René Morales y Reinaldo Canales lo metieron en las palmeras y fue liberado gracias a la denuncia inmediata ante los medios nacionales e internacionales. Terminó golpeado, torturado y encerrado en las celdas de la cárcel de la Policía nacional preventiva de Trujillo.
El mismo 6 de enero atentaron contra la vida de varios campesinos del asentamiento La Concepción, disparando varias ráfagas de AK 47.
Mientras este clima de represión ocurre, en el marco de la Operación Tumbador, Porfirio Lobo y César Ham (director del INA) llaman a los campesinos del MUCA (Movimiento Unificado Campesino del Aguán) para firmar un nuevo convenio.
Cuando secuestraron a Juan Chinchilla, los terratenientes enviaron un mensaje claro: están dispuestos a seguir peleando la tierra, aunque para ello tengan que terminar con muchas vidas, sin importarles el costo político para el gobierno y su impacto a nivel internacional.
Después del asesinato de los cinco campesinos (del Movimiento Campesino del Aguán - MCA) en la Guadalupe Karney, de dos campesinos de La Aurora y Los Marañones el 9 de enero, el atentado contra el campesino Franklin Diaz Padilla de la empresa campesina El Despertar, el 17 de enero guardias del empresario Miguel Facussé intentaron secuestrar al ciudadano Sergio Pineda, un amigo de los campesinos del asentamiento La Confianza.
Lo persiguieron durante unos diez minutos y al llegar a La Confianza, le hicieron varios disparos y lo bajaron del vehículo. También persiguieron al miembro del MUCA, Celeo Rodríguez, quien había salido de su casa al escuchar los disparos.
Durante el 18 y 19 de enero, un personaje con carácteristicas de sicario se estacionó frente a la casa del coordinador del FNRP en Colón, Wilfredo Paz, mientras transmitía su programa de noticias en Radio Globo.
El 22 de enero, en horas de la tarde, el profesor René Turcios, acompañado por el dirigente del MUCA, Rudy Hernández, fueron perseguidos por una motocicleta mientras se dirigían hacia Tocoa. A esa misma hora, dos vehículos ingresaban a las tierras que ocupa el movimiento campesino de Elixir, en el municipio de Sabá, e iniciaron persecución contra el jóven campesino Jorge Santos. Pese a los muchos disparos de armas de grueso calibre, el jóven logró escapar, mientras cuatro vehículos más sitiaban tel asentamiento.
Los días 21 y 22 de enero, una delegación internacional que se desplazaba por el Bajo Aguán, encabezada por el ciudadano noruego Hans Petter Buvollen, fue perseguida por un vehículo perteneciente a los empresarios terratenientes hasta que logro llegar a los asentamientos campesinos.
En medio de esta terrible represión, la lucha tiene ta,bién sus triunfos. El 21 de enero desmilitarizaron las instalaciones del INA en Colón y se anunció que ya ffue establecido el precio de las 3 mil hectáreas entregadas al MUCA el año pasado.
Sin embargo, en el Bajo Aguán la nueva estrategia es vender la idea que se está cumpliendo los compromisos con los campesinos, pero sigue la implementación de un plan de secuestro y asesinato a dirigentes campesinos y dirigentes del FNRP. En esta operación encubierta participan sicarios, policías activos, paramilitares y miembros del Ejército, con asesoría norteamericana.
Pero la lucha sigue. El 25 de enero, las mujeres del Aguán se tomarán la entrada al departamento de Colón para exigir castigo para los asesinos de los campesinos, una asamblea nacional constituyente, el retorno de Manuel Zelaya Rosales y en contra de la militarizacion en el Aguán.
A principios de febrero, continuarán la lucha los jóvenes con similares acciones,t bajo la organización del FNRP de la región.
Además, reiteramos la urgencia de instalar un observatorio permanente de derechos humanos.
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